PHOENIX (EEUU), 7 (Reuters/EP)
El Gobierno de Estados Unidos ha pedido a la Cámara de Representantes que apruebe un plan de seguridad fronteriza tan pronto como sea posible, preferiblemente a partir de la semana próxima, cuando los legisladores se reúnan para una sesión especial.
La secretaria de Seguridad Interior, Janet Napolitano, informó de que miembros del Gobierno contactaron a la presidenta de la Cámara baja, Nancy Pelosi, para que acelerara la aprobación del proyecto del Senado, que busca un fondo de 600 millones de dólares para mejorar la seguridad en la frontera entre Estados Unidos y México.
“El Gobierno ha estado en contacto con la presidenta de la Cámara, y (...) obviamente apoyará su aprobación tras su paso por el Senado y lo hará lo más pronto posible”, afirmó Napolitano.
La Cámara de Representantes ya aprobó su propia versión de la ley, pero los líderes demócratas de la instancia ahora están debatiendo la posibilidad de votar una versión del Senado en una sesión especial de legisladores durante la semana próxima, de acuerdo al sector demócrata.
Los legisladores de la Cámara interrumpirán su receso de verano para regresar a Washington y considerar un proyecto de ley de 26.100 millones de dólares, destinado a ayudar a los estados a superar sus déficit de presupuesto y evitar despidos.
Sin embargo, la decisión podría no tomarse hasta el lunes, según los demócratas. Si los representantes aprueban la versión inmigratoria del Senado, entonces ésta estaría lista para ser promulgada por el presidente Barack Obama.
La medida del Senado fue aprobada por unanimidad el miércoles durante una sesión nocturna, antes del inicio del receso de verano de cinco semanas en la Cámara alta.
El senador demócrata Charles Schumer, partidario del proyecto, dijo que éste pagaría para contratar 1.500 agentes federales más para patrullar la frontera con México, donde el flujo de inmigrantes ilegales se ha convertido en un tema conflictivo y podría tener un rol importante en el resultado de las elecciones legislativas del 2 de noviembre.
Los demócratas cuentan con mayorías en ambas cámaras del Congreso, pero varios sondeos de opinión muestran que los republicanos están ganando terreno con una agenda que incluye llamados para controlar la inmigración ilegal.