SEÚL, 26 (Reuters/EP)
El secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, ha afirmado este miércoles que Corea del Norte representa “una seria amenaza” para la seguridad mundial, justo en el momento en que el Gobierno norteamericano está sondeando al régimen comunista para analizar la posibilidad de retomar las conversaciones a seis bandas sobre su desnuclearización.
Representantes de ambos gobiernos se han reunido esta semana en Ginebra (Suiza) para conversar sobre el programa nuclear norcoreano y estudiar la posibilidad de reiniciar el proceso de diálogo que quedó suspendido a finales de 2008 cuando Pyongyang realizó ensayos con misiles nucleares.
En el marco de este ligero acercamiento entre ambos países, Estados Unidos y Corea del Norte han alcanzado este mes un acuerdo para reactivar el proceso de recuperación de cadáveres de soldados estadounidenses muertos en la Guerra de Corea (1950-1953), que se mantiene paralizado desde 2005.
A pesar de estos esfuerzos por mejorar las relaciones bilaterales, Panetta no ha dudado en criticar duramente el régimen neocomunista durante su primer viaje oficial a Asia como responsable del Pentágono. El lunes, Panetta definió al régimen liderado por Kim Jong Il como “temerario” y remarcó que representa “una seria amenaza” para la seguridad global, en un artículo publicado por un diario surcoreano en vísperas de su llegada a Seúl.
“Vengo aquí porque de muchas maneras esta es la línea del frente”, ha afirmado en un discurso ante cientos de soldados estadounidenses y surcoreanos en Seúl. Un responsable de su departamento ha explicado a los periodistas que acompañan a Panetta que es muy importante que los temas militares estén “alineados” con las relaciones diplomáticas.
“Desafortunadamente, nuestra experiencia ha sido que nuestro amigos norcoreanos atraviesan ciclos de relaciones diplomáticas y provocaciones y tenemos que estar preparados ante un nuevo ciclo”, ha indicado el responsable.
A pesar de la aparente voluntad de Pyongyang de retornar a la mesa de negociaciones, los analistas consideran que el Gobierno norcoreano podría intentar realizar nuevos ensayos con misiles nucleares o atacar otra vez contra intereses surcoreanos. Corea del Norte mató el año pasado a unos 50 surcoreanos en un ataque contra un buque y contra una isla en disputa.
Además, el régimen de Kim Jong Il desveló el año pasado una central de enriquecimiento de uranio que supone un paso más en el proceso para dotarse de armas atómicas. El régimen está preparando paso a paso la sucesión de su 'amado líder', Kim Jong Il, que será relevado por su hijo Kim Jong Un, y podría aprovechar ese momento para protagonizar nuevas provocaciones a su vecino del sur.
“Creo que siempre tenemos que estar preparados, desde el punto de vista de la seguridad, para trabajar con la probabilidad de que la sucesión en Corea del Norte lleve a mayores provocaciones”, afirmó Panetta, en declaraciones a la prensa el pasado viernes.
Corea del Sur es la última parada del primer viaje oficial del nuevo secretario de Defensa a Asia, que ha incluido visita a Japón e Indonesia. En los diferentes encuentros que ha mantenido con dirigentes asiáticos, Panetta ha subrayado que las Fuerzas Armadas de Estados Unidos mantendrá una firme postura en la región del Pacífico a pesar de los recortes presupuestarios que sufre el Pentágono.
La apuesta decidida de Estados Unidos por mantener su presencia militar en Asia tiene especial importancia en países como Japón y Corea del Sur, donde el país norteamericano tiene destacados de forma permanente unos 80.000 militares y sus aliados están preocupados por el crecimiento de China como potencia militar.
En este sentido, el jefe del Pentágono ha explicado que la retirada militar de Irak y el comienzo del repliegue de Afganistán permitirán centrar la atención en la región de Asia.
“Todos los éxitos que hemos tenido ahora nos dan la oportunidad de garantizar el tipo de inversiones que necesitamos en el Pacífico”, dijo Panetta en su primer día de visita en Japón. En su discurso ante militares norteamericanos desplegados en Japón en la cubierta del buque de mando USS Blue Ridge, el jefe del Pentágono subrayó la importancia que tiene para su país la región de Asia-Pacífico.
“Esta área es importante. Hay continuas amenazas que tenemos que afrontar. Amenazas de potencias emergentes, amenazas de Corea del Norte, por proliferación nuclear, amenazas cibernéticas”, subrayó. “Tenemos muchas amenazas que continúa afrontando este país”, concluyó.