ROMA, 21 (EUROPA PRESS/loria Moreno)
El empresario italiano Giampaolo Tarantini, que está acusado de haber llevado prostitutas a las fiestas privadas del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, obtuvo hoy el arresto domiciliario tras pasar tres días en la cárcel.
Tarantini había sido detenido el pasado viernes por tráfico de drogas y para evitar su fuga o una posible contaminación de las pruebas. Sin embargo, el juez decidió hoy concederle el arresto domiciliario al considerar que no existe riesgo de huída sino sólo de reincidencia.
Este empresario procedente de la región de la Puglia (sur de Italia) se sitúa en el centro de las investigaciones sobre la presunta explotación de la prostitución en las fiestas de Berlusconi. Además está acusado por irregularidades en el servicio de sanidad pública y tráfico de sustancias estupefacientes.
El caso fue dado a conocer a principios de este verano por los medios de comunicación, que difundieron incluso las conversaciones que Berlusconi mantuvo con una de estas prostitutas, Patrizia D'Addario.
Por su parte, 'Il Cavaliere' asegura que él no estaba al corriente de quiénes eran en realidad las “amigas” de Tarantini e insiste en que ha sido víctima de un complot orquestado para derribarle. Por el momento, la Justicia no le inculpa en relación con este caso.