España, Francia e Italia acordaron este jueves apoyar la propuesta de la Presidencia alemana sobre el futuro Tratado de la UE y aseguraron que no están dispuestos a negociar ningún elemento estructural del mismo.
Este acuerdo fue adoptado en la reunión que, durante el Consejo Europeo que comenzó hoy en Bruselas, mantuvieron el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, su homólogo italiano, Romano Prodi, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
Los tres países, según informaron en rueda de prensa los secretarios de Estado españoles de Comunicación, Fernando Moraleda, y de Asuntos Europeos, Alberto Navarro, sí están abiertos a encontrar fórmulas para solucionar las discrepancias que plantean algunos socios, pero siempre que no suponga reabrir elementos centrales de la frustrada Constitución Europea.
Ante la posibilidad de que esta posición choque con las exigencias del Reino Unido y Polonia, Moraleda reconoció desconocer si se llegará a un consenso, pero consideró que esta iniciativa política “tiene la suficiente intensidad como para que estemos más cerca del acuerdo que del desacuerdo”.
Por su parte, Navarro explicó que la propuesta alemana recoge “toda la esencia y los equilibrios del Tratado constitucional”, con un “salto impresionante” en el número de materias que pasarán de votarse por unanimidad a decidirse por mayoría cualificada y con un impulso a la política exterior y de justicia e interior de la UE.
Reconoció que del texto futuro desaparecerán las menciones a los símbolos (himno, bandera, etcétera) y algunas denominaciones como la de “ministro de Exteriores”, aunque España, Francia e Italia no aceptarán que se modifiquen las funciones de esa figura.
Navarro subrayó el “profundo valor político” que tiene esta iniciativa de tres países tan diferentes: dos fundadores de la Comunidad Europea, dos que apoyaron la Constitución y uno que no, dos de izquierdas y uno conservador.
Destacó, además, la necesidad de un acuerdo de este tipo cuando en la cumbre de Bruselas hay países que públicamente han pedido “recortes sustanciales” del Tratado constitucional.
Los tres aliados se comprometieron a impulsar esta misma noche los trabajos en favor de la propuesta alemana planteando el asunto en la cena que comparten los jefes de Estado y de Gobierno de los Veintisiete.
El secretario de Estado de Asuntos Europeos insistió en la disposición tripartita a buscar fórmulas que permitan al Reino Unido y a Polonia aceptar la propuesta alemana.
En este sentido, preguntado por la posibilidad de una modificación en el sistema de toma de decisiones fundamentado en la doble mayoría (55 por ciento de Estados y 65 por ciento de población), Navarro aseguró que España vetaría cualquier fórmula que supusiera bajar el umbral de población, aunque apoyaría subirlo.
Navarro reiteró que el contenido de la propuesta alemana es “ampliamente satisfactorio” para España al recoger la sustancia del Tratado constitucional.