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El G-7, dispuesto a cualquier medida para garantizar la estabilidad económica

El G7 (países más ricos del mundo) se mostró este sábado dispuesto a tomar las “medidas adecuadas, individuales o colectivas”, para garantizar la estabilidad económica y pidió a las naciones exportadores de petróleo que incrementen la producción.

En el comunicado final emitido al término de su cumbre en Tokio, los ministros de Finanzas de Japón, EEUU, Alemania, Reino Unido, Canadá, Italia y Francia no señalan, sin embargo, ninguna vía para una acción concertada que rebaje las tensiones económicas actuales.

Los líderes de las finanzas de las naciones ricas pidieron además a los países exportadores de petróleo que incrementen la producción para así rebajar el precio del barril, que llegó el mes pasado a alcanzar los cien dólares.

“Animamos a los países de la OPEC y otros productores de petróleo a que aumenten su producción y reiteramos la necesidad de aumentar la capacidad de las refinerías y mejorar la eficiencia energética”, apunta el comunicado.

Los ministros de Finanzas del G7 admitieron al inicio del comunicado que, aunque los fundamentos de la economía mundial “siguen siendo sólidos”, la situación actual es “más incierta” que en octubre pasado.

Ello se debe en parte, reconocen, al empeoramiento de la economía estadounidense, aunque el G7 confía en que mantenga el crecimiento este año y no caiga en recesión, como temen muchos analistas financieros.

El Fondo Monetario Internacional (FMI), presente en Tokio en la figura de su director, Dominique Strauss-Kahn, rebajó recientemente en tres décimas su previsión de crecimiento económico mundial al 4,1 por ciento, el más débil desde 2003.

En cuanto a las divisas, uno de los aspectos que el Grupo de los Siete suele tratar en sus encuentros, los ministros señalaron que “una volatilidad excesiva y los movimientos desordenados en los tipos de cambio no son deseables para el crecimiento económico”.

“Seguiremos vigilando los mercados de cerca y cooperando, cuando sea apropiado. Apoyamos la decisión de China de aumentar la flexibilidad de su moneda, pero ante el aumento del superávit por cuenta corriente y la inflación doméstica, alentamos a una apreciación de su tipo de cambio”, indican.

El G7, además, debatió la propuesta de Japón, el Reino Unido y EEUU de crear, en colaboración con el Banco Mundial (BM), un fondo millonario para ayudar a los países pobres a participar en el cambio climático.