Kim Jong Il visita China para conseguir apoyo de su único gran aliado

DALIAN (CHINA), 3 (Reuters/EP)

El dirigente de Corea del Norte, Kim Jong Il, llegó a China este lunes para comenzar una visita con la que intentará conseguir de su único gran aliado apoyo económico y protección diplomática. Éste es su primer viaje al extranjero desde que en 2008 sufriera un derrame cerebral.

China, que ha respaldado durante décadas al régimen norcoreano, está cada vez más cansada del comportamiento provocador del país vecino, según algunos analistas. Los viajes a China que ha realizado Kim en otras ocasiones han producido algunas medidas que han contribuido a reducir el peligro que representa Corea del Norte para los países de su entorno, y se espera que durante esta visita Kim consiga más ayuda de Pekín a cambio de controlar a su Ejército y volver a las conversaciones sobre desarme nuclear, en las que no participa desde hace más de un año.

Con gafas de sol y con su característico uniforme caqui, Kim llegó en una caravana formada por unas 50 limusinas y otros vehículos y entró en el Hotel Furama de la ciudad portuaria de Dalian, en la provincia de Liaoning (noreste de China).

Kim se ha trasladado a China en su tren blindado, tomando medidas policiales de precaución antes de cada parada. Además, el Hotel Furama ha cubierto su fachada con una sábana blanca por seguridad y para evitar las miradas indiscretas de los periodistas.

En su último viaje, en 2006, Kim visitó discretamente los centros industriales chinos para observar de primera mano el secreto del rápido crecimiento de la economía del país vecino. Dalian, una ciudad reconstruida que ha atraído importantes inversiones extranjeras, es un símbolo del desarrollo que los dirigentes chinos han recomendado a Kim y a su padre, el fundador de Corea del Norte, Kim Il Sung, para lograr que la moribunda economía norcoreana reviva.

Pero la aplicación de reformas económicas favorecería la apertura del hermético Estado norcoreano y podría resultar perjudicial para la ideología de Kim, que prioriza un Ejército lo suficientemente fuerte como para impedir una posible invasión en perjuicio de la población, que pasa apuros económicos.

La visita del dirigente norcoreano no se ha confirmado oficialmente, pero esto no es de extrañar ya que la visita de 2006 no se anunció hasta que el tren de Kim hubo cruzado la frontera de regreso a su país.

Los periodistas acampados en la ciudad fronteriza china de Dandong fueron expulsados por las fuerzas de seguridad chinas poco antes de que el tren de Kim cruzase el río, y la Policía china ha impedido que unos tripulantes de un barco surcoreano graben imágenes en Dalian.

Algunos analistas se han planteado la posibilidad de que el hijo menor de Kim, Jong Un, se una a su padre en este viaje a China para que lo presente como su sucesor.

ECONOMÍA NORCOREANA PRECARIA

La visita se produce en un momento en que la economía norcoreana se encuentra en una situación especialmente precaria, al verse afectada por las sanciones que le ha impuesto el Consejo de Seguridad de la ONU por el ensayo nuclear que realizó hace un año y debido a la chapucera reforma monetaria del año pasado, que causó un incremento de la inflación y generó malestar entre la población.

Además, Corea del Sur pretende castigar a Corea del Norte reduciendo sus finanzas internacionales y profundizando su aislamiento. Seúl teme un posible ataque de Pyongyang, que podría derivar en un conflicto armado, después de que, según el Gobierno surcoreano, Corea del Norte atacase a finales del pasado marzo un barco de la Marina surcoreana en un incidente en el que murieron 46 militares.

Esto, en cambio, podría acercar a Pyongyang aún más a Pekín. Peter Beck, investigador de la Universidad de Stanford (California, Estados Unidos), consideró que China “se ha mostrado muy reacia a abandonar a los parias”. “Si acaso, reforzará la importancia de la inversión china porque es el único juego aceptado por todos”, añadió.

En 2009, los intercambios comerciales entre China y Corea del Norte alcanzaron los 2.048 millones de euros. Dado que la economía norcoreana se ha debilitado desde que Kim asumió el poder en 1994, China ha estado proporcionando más alimentos, petróleo y otros bienes a Corea del Norte.