LONDRES, 3 (Reuters/EP)
La reducción en el gasto militar de Reino Unido podría haber debilitado a las Fuerzas Armadas de tal modo que fueran incapaces de cumplir con sus obligaciones. Esta es la advertencia pronunciada el martes por la Comisión de Defensa del Parlamento.
Este organismo señala que el deseo del Gobierno de ahorrar costes se ha impuesto en algunos casos sobre las necesidades de seguridad del país.
En su opinión, el Ejecutivo parece haber “aplazado la razonable aspiración de comulgar los compromisos con los recursos” al sumarse a la misión de la OTAN en Libia en el momento de realizar los recortes, del ocho por ciento del presupuesto militar para los próximos cuatro años.
Además, Reino Unido mantiene en Afganistán a unos 10.000 soldados, lo que lo convierte en el segundo contingente sobre el terreno solo por detrás del de Estados Unidos.
“Hay una preocupación creciente sobre que las Fuerzas Armadas podrían caer por debajo del mínimo requerido para cumplir con los compromisos a los que se enfrenta actualmente y mucho menos las tareas a las que probablemente se enfrentará entre 2015 y 2020, cuando se admite que habrá falta de capacidades”, se lee en un informe de la Comisión.
El presidente de este órgano, el conservador James Arbuthnot, argumenta que el Gobierno parece pensar que Reino Unido puede mantener su influencia en el mundo mientras reduce el gasto en defensa y diplomacia. “No estamos de acuerdo”, sentencia.
En particular los comisionados critican que el Gobierno --coalición entre conservadores y liberal demócratas-- no haya accedido finalmente a adquirir nueve aviones de reconocimiento Nimrod MRA4.
“Parece un claro ejemplo de la necesidad de hacer grandes ahorros por encima de la seguridad estratégica de Reino Unido y los requerimientos de capacidad de las Fuerzas Armadas”, concluyen los miembros de la Comisión, que igualmente denuncian la decisión de retirar los aviones Harrier. Hasta dentro de una década no se espera que concluya el desarrollo de dos nuevos modelos de aviones que sustituyan a estas unidades.
En cambio el ministro de Defensa, Liam Fox, asegura que gracias a los recortes las fuerzas británicas vuelven a una base de estabilidad, y recuerda que el presupuesto militar de 34.000 millones de libras (39.000 millones de euros) es el cuarto mayor del mundo.