KARACHI (PAKISTÁN), 27 (Reuters/EP)
Miles de personas se han concentrado este domingo ante el consulado de Estados Unidos en la ciudad de Karachi para protestar por la incursión de helicópteros de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF), que el sábado mataron a 24 militares paquistaníes.
Los manifestantes han coreado consignas como “Muerte a Estados Unidos” e incluso uno de ellos ha logrado escalar el muro del complejo, fuertemente vigilado, y ha colgado una bandera de Pakistán en la alambrada de la valla.
“Estados Unidos está atacando nuestras fronteras. El Gobierno debe romper relaciones de inmediato”, ha opinado una de las manifestantes, Naseema Baluch, una ama de casa. “Estados Unidos quiere ocupar el país, pero no lo permitiremos”, ha apostillado.
También en Mohmand, la provincia en la que se produjo el ataque de la ISAF, unas 500 personas han secundado una protesta convocada por Jamaat e Islami, el principal partido religioso paquistaní. “La yihad es la única respuesta a Estados Unidos”, coreaban los participantes en la protesta.
Incluso los camioneros que trabajaban transportando suministros de la ISAF arriesgando sus vidas ante los posibles ataques talibán defienden la decisión del Gobierno paquistaní de interrumpir este tráfico. “Pakistán es más importante que el dinero. El Gobierno debe interrumpir todos los suministros de la OTAN para que se den cuenta de lo importante que es Pakistán”, ha declarado el camionero Taj Malli.
Sin embargo, otros paquistaníes dudan de que los gobernantes tengan la valentía necesaria para enfrentarse a Estados Unidos. “Este Gobierno es cobarde. No hará nada. Ya ha habido otros ataques similares en el pasado, pero ¿qué han hecho?”, se lamentaba el comerciante Sabir Jan.
Mientras, los diarios paquistaníes denuncian también el ataque. “Estados Unidos apuñala a Pakistán por la espalda, otra vez”, titula el diario 'Daily Times', en referencia a la incursión de las fuerzas especiales estadounidenses del pasado mes de mayo en Abbottabad en la que murió el líder de Al Qaeda Usama bin Laden.
El funeral por los militares fallecidos se ha celebrado un cuartel de Peshawar. Los ataúdes de las víctimas, cada uno de ellos con una bandera blanca y verde paquistaní encima, han protagonizado un acto al que han asistido el jefe del Ejército, el general Ashfaque Pervaiz Kayani, el gobernador de Pujtunjaw, Syed Masood Kausar, y el ministro de Ferrocarriles, Ghulam Bilor, en representación del Gobierno federal.