LA HABANA, 6 (Reuters/EP)
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, se ha mostrado este martes “convencido” de que su tercera visita a la isla como jefe de la diplomacia española será “exitosa”.
“Estoy convencido de que las jornadas de trabajo de visita en Cuba serán positivas, serán exitosas”, ha declarado antes de entrevistarse con el canciller cubano, Bruno Rodríguez, en la sede de la cancillería.
La entrevista entre ambos ha arrancado a las 10.00 horas (16.00 en la España peninsular) y ha ido seguida de un encuentro entre ambas delegaciones en la que han participado, por parte española, el director general para Iberoamérica, Juan Carlos Sánchez, el jefe de gabinete del ministro, Agustín Santos, y el embajador de España en Cuba, Manuel Cacho.
A continuación, ambas delegaciones preveían almorzar juntas en algún restaurante de La Habana Vieja, han confirmado a Europa Press fuentes de la delegación que acompaña al ministro.
Por la tarde, Moratinos se entrevista con el arzobispo de La Habana, cardenal Jaime Ortega, quien lleva directamente las negociaciones con las autoridades cubanas en pro de los presos políticos de la isla, que se han traducido hasta la fecha en la liberación de Ariel Sigler, la salida de prisión de Darsi Ferrer, que permanece bajo arresto domiciliario, y el acercamiento de otros 12 presos a cárceles más cercanas a sus lugares de origen.
El jefe de la diplomacia española volverá a reunirse este miércoles con el canciller Bruno Rodríguez y espera que le reciba el presidente, Raúl Castro, aunque este encuentro no está cerrado.
Moratinos busca con este viaje acompañar las gestiones de la Iglesia cubana en favor de los presos políticos y los Derechos Humanos. El ministro confía en que se produzcan nuevas liberaciones y otras mejoras en el campo de las libertades en la isla, como podría ser una mayor facilidad para los cubanos en el acceso a Internet.
De cumplirse este pronóstico podría ayudar a desactivar la huelga de hambre del disidente Guillermo Fariñas, debilitado y en riesgo de muerte tras 132 días de ayuno para exigir la excarcelación de 25 opositores enfermos.
Fuentes diplomáticas consultadas por Europa Press admiten que un deceso del opositor afectaría al proceso abierto entre las autoridades cubanas y la Iglesia.
La previsible escalada de críticas por parte de la comunidad internacional hacia la isla en caso de que muriera Fariñas podría retrasar los eventuales gestos que, en relación con los presos y los Derechos Humanos, el régimen esté dispuesto a llevar a cabo, según las fuentes.
También complicaría los esfuerzos de Moratinos por convencer a sus socios de la Unión Europea de que el diálogo es la mejor estrategia con Cuba.
La Comisión Cubana de Derechos Humanos, un grupo ilegal pero tolerado, ha indicado que alrededor de 40 presos políticos están siendo entrevistados y fotografiados en las cárceles, una señal de que su liberación podría ser inminente.