EL CAIRO, 7 (Reuters/EP)
Hosni Mubarak presidirá este lunes la primera reunión del nuevo Gobierno egipcio desde el inicio, hace casi dos semanas, de las multitudinarias protestas contra el régimen, que forzaron la disolución del anterior gabinete.
El pasado 28 de enero, el presidente Mubarak ordenó el cese en pleno de su Gobierno con el propósito de refrenar las protestas contra la opresión y la corrupción que caracterizan a su régimen. En cuanto a su propia continuidad, el presidente se aferra al cargo y se ha limitado a anunciar que no se presentará a las elecciones presidenciales de septiembre.
El Gobierno --con el vicepresidente Omar Suleimán al frente-- se reunió este fin de semana con parte de la oposición para buscar una solución a la crisis política. En principio, ambas partes --entre las que se encontraba el grupo ilegal, pero tolerado, de los Hermanos Musulmanes-- han alcanzado un acuerdo para la formación de una comisión que estudie la introducción de reformas en la Constitución.
No obstante, los jóvenes que permanecen en la plaza Tahrir (Liberación) no respaldan este proceso y el líder de la Asociación Nacional por el Cambio (ANC), Mohamed ElBaradei, ha expresado sus reticencias ante estas conversaciones, que ha calificado de “opacas”, y ha reiterado que no negociará con el régimen hasta que dimita Hosni Mubarak.
Entretanto, miles de manifestantes permanecen acampados en la plaza Tahrir, en el centro de El Cairo, con el propósito de no regresar a sus casas hasta en tanto no dimita el presidente y de convocar nuevas movilizaciones masivas para el martes y el viernes de esta semana.
El Ejército intenta estrechar su control sobre las zonas que rodean la plaza Tahrir para facilitar el tráfico. Esta pasada noche, los manifestantes salieron repentinamente de sus tiendas de campaña para impedir los intentos militares de rodearlos en una zona más reducida, y decenas de ellos durmieron incluso dentro del remolque de los camiones del Ejército con este propósito.