MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
El presidente de Mauritania, Mohamed Ould Abdel Aziz, admitió este martes que las fuerzas de seguridad del país africano presentan “deficiencias” evidentes tanto en su gestión como en su equipamiento, que vendrían arrastrándose desde los últimos años y que perjudicarían la erradicación y persecución de secuestros como el de los tres cooperantes españoles retenidos desde el 29 de noviembre.
Durante una visita al hospital Cheij Zayed en Nuakchot, Abdel Aziz respondió a preguntas de la prensa acerca de las medidas adoptadas por las autoridades para prevenir nuevos secuestros. En este sentido, aclaró que el Gobierno está “vigilante” y ha adoptado las iniciativas que ha considerado “apropiadas”, pero también admitió que cierta “acumulación” de deficiencias “son la causa de lo que se ha producido”, en alusión al rapto de los tres cooperante sede Barcelona Acciò Solidària.
Abdel Aziz, que tomó posesión en el cargo el pasado 5 de agosto, indicó que los problemas que sufren las fuerzas de seguridad “no se resuelven en un sólo día”. “Conviene subrayar que el Ejército ha padecido el caos y que las fuerzas de seguridad no disponían de los equipamientos necesarios ni tienen los medios y el compromiso exigidos”, según informaciones de la Agencia Mauritania de Información.
“Desde hace algunos meses o un año --el ahora presidente lideró un golpe militar en agosto de 2008--, hemos intentado equipar a las Fuerzas Armadas y de seguridad, entrenarlas y prepararlas para llevar a cabo sus misiones esenciales y hay algunas mejoras”, agregó.
El mandatario mauritano recibió este martes en el palacio presidencial al embajador español en el país, Alonso Dezcallar, con quien habría comentado las novedades en el secuestro de Alicia Gámez, Roque Pascual y Albert Vilalta, cuya autoría ha reivindicado la organización terrorista Al Qaeda en el Magreb Islámico.