El portavoz del grupo Sí Podemos en el Parlamento de Canarias, Manuel Marrero, ha considerado una “indecencia histórica” el pronunciamiento del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, a favor de las tesis marroquíes sobre el Sahara.
Marrero ha afirmado que avalar la tesis de Marruecos sobre el Sahara Occidental es ir contra las resoluciones de la ONU que defiende la celebración de un referéndum para decidir el futuro de este territorio y ha señalado que Sánchez se ha puesto “de rodilla” y ha cedido “al chantaje” del Gobierno de Marruecos.
Marruecos ha dado a conocer este viernes una carta del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al rey Mohamed VI en la que afirma que España considera la propuesta de autonomía presentada en 2007 por Rabat para el Sahara Occidental como “la base más seria, creíble y realista para la resolución de esta disputa”.
El portavoz parlamentario ha indicado que es la primera vez en 47 años de conflicto, que un presidente del Gobierno español se manifiesta en pro de las tesis marroquíes y se salta “una línea roja” que supone el incumplimiento de una resolución de las Naciones Unidas.
Agrega que además el gobierno marroquí se encuentra fortalecido por el posicionamiento de Arabia Saudí, Estados Unidos, Francia e Israel y advierte que el posicionamiento de “una parte” del Gobierno español puede marcar una tendencia en la Unión Europea en el mismo sentido.
“Marruecos se encuentra reforzado y utiliza el chantaje frente al estado español” ha insistido Marrero, que reitera que el pueblo saharaui es quién debe decidir su futuro “y no Marruecos ni España”.
Marrero considera que España no debe abandonar a su suerte al Sahara y ha opinado que con este asunto el presidente del Gobierno está intentando producir una ruptura en el Ejecutivo estatal.
El portavoz parlamentario de Si Podemos ha señalado que además habrá que esperar que dice Argelia, en cuyo territorio están en gran parte los campos de refugiados, y es el principal suministrador de gas en España.
Marrero ha señalado que no se puede establecer una relación de vecindad basada en el chantaje sino en el respeto mutuo y ha opinado que a España le corresponde hacer justicia con el pueblo saharaui y hacer cumplir las resoluciones internacionales.