Un paisaje protegido
que invita a reflexionar,
viendo el espectacular
cambio que se ha producido.
De rabo-gato florido
el barranco se ha llenado,
todo de paja pintado
por esta planta invasora,
que trastoca nuestra flora
y el paisaje ha transformado.
Jócamo, 16.V.2023
NOTA: Poco se puede añadir a lo mucho escrito sobre el rabo-gato (Pennisetum setaceum = Cenchrus setaceus). Esta grácil gramínea oriunda de las estepas africanas se ha expandido por el mundo, en unos casos impulsada por la jardinería y en otros por su eficiente dispersión natural. Sea como fuere, se ha convertido en una especie subcosmopolita, que invade tanto hábitats naturales como antropizados, transformando su fisonomía y desplazando a la flora autóctona. Es una amenaza para la conservación de la biodiversidad y gestión de la naturaleza, especialmente en islas, como las Canarias, donde la gran singularidad de su flora es consustancial a su enorme fragilidad.