Miedo al ambiente

Hoy 5 de junio, La Palma camina en la incertidumbre entre la conservación y el desarrollo sostenible (con al menos diez mil pobres), que no acaba de llegar, y que se debería calificar de ‘SOStemible’. Me van a permitir que me extienda, pues la ocasión es oportuna y tampoco está la cosa para menos.

En estos días la polémica nos acompaña intoxicando nuestras frágiles conciencias, tanto en el panorama internacional, nacional y local: que si la FIFA está corrompida, que si en el Sáhara no se resuelve el conflicto (al igual que en Colombia, Siria, Palestina, y así medio mundo), que si están arrasando lo que queda de Amazonas, que si aumenta la temperatura del planeta, que si el TIPP…

A nivel nacional qué se puede contar que ya no se sepa, (los juzgados colapsados por los ‘VIP’, La Pantoja, La Infanta Cristina y el Urdangarín, cúpulas de partidos políticos y sindicatos… Sería ideal que se destinen más medios y de paso que se mire lo de separar los poderes. El dinero podría salir de recortar en el Ministerio de Ataque, perdón, quería decir Defensa) desahucios, desnutrición infantil, eternas listas de espera en la sanidad, suicidios y aumento de enfermedades mentales, exilio de profesionales, recortes en Educación…En definitiva, los ricos más ricos y los pobres más pobres.

Y centrando la atención en lo local, unas elecciones en Canarias bajo una ley antidemocrática que pide ser reformada a gritos. Sus señorías cobrando bien (y pocos se lo ganan), el que menos lo que dos trabajadores, de esos que forman la mayoría del pueblo, esa que volverá a elegir en noviembre quien gobierna este país, si es que es uno claro, perdonen que lo dude, pero es que con la pitada al himno, da que pensar (con lo bien que funcionaría una república federal).

Ahora hablando con libertad de expresión, mejor no tocar lo del fútbol, que ya es bastante con tener en la isla un equipo de 2º B que difícilmente se mantenga solo de ilusión y necesite de la aportación pública.

Pero el tema que quería exponer para poder reflexionar tiene que ver con la gestión de los recursos de la Isla, en especial de nuestro medioambiente, pues unas mil personas han firmado en contra del proyecto de Museo de Arte en La Naturaleza, que el afamado artista Don Agustín Ibarrola Goicoechea realizará en el garafiano barranco de La Luz, por encargo del Excelentísimo Cabildo Insular de La Palma, y con la colaboración de Don Facundo Fierro.

Los argumentos en contra son varios, entre ellos, que los ¿180.000?euros de presupuesto se pueden destinar a ‘cosas’ prioritarias, que no ha habido ‘talante’ democrático desde la institución insular para hacer un concurso público, que la información no está clara, que si el lugar está muy lejos para que el turismo visite la obra, que si Ibarrola no es tan buen artista ‘’como lo pintan’’, que si es un prepotente y mal educado, que si es paisano del fallecido Chillida o de los conquistadores que arribaron hace más de cinco siglos, que si aquí tenemos artistas locales mejores ,y sobre todo, que se va crear un impacto ambiental negativo, alterando el ecosistema.

Como de sensibilidad y dinero público se trata, no podía estar impasible, y el pasado fin de semana tuve la oportunidad de ir al lugar en cuestión, previo paso por el Barranco de Izcagua en Puntagorda, donde dicen que se va a realizar ‘otra obra de arte’ con la intervención de Ibarrola. La verdad es que el mirador realizado junto al Mercadillo de Puntagorda no aporta un especial atractivo al lugar, que ya tiene su encanto rural y natural.

Llegado a Santo Domingo, junto a unos amigos, y tras recorrer la tortuosa carretera, que se adapta serpenteante a la orografía abrupta y de gran desnivel, salpicada de cantidad de casas de nueva construcción (y no todas de estilo tradicional), a apenas unos minutos del casco histórico, y pasada una pequeña cantera de extracción de áridos del propio Cabildo, está La Fuente La Huerta, que incluye un pequeño merendero integrado en el bello entorno.

Esa es la entrada al lugar de la discordia, nos tropezamos una simpática pareja de origen germano, pero afincados en Garafía, que paseaban unos burros, la estampa no deja de ser peculiar, de postal.

Siguiendo el sendero unos pasos más arriba, encontramos numerosas cuevas escavadas en la roca, y que nos cuentan que estaban ocupadas hasta hace poco, una vecina nos dice que allí falleció una persona por la caída de una roca desde el risco, y que ello produjo el abandono del lugar por parte de los cabreros.

Por tanto la ‘degradación’ de este antropizado lugar es manifiesta, al igual que su inseguridad.

Para ir concluyendo, dejar clara mi postura en el asunto, primero creo que la obra puede ser beneficiosa para Garafía y La Palma, y que el ‘maestro’ Ibarrola es un buen artista (como muchos otros de aquí y allá),solo hay que ver el ‘Bosque de Oma’, dicho esto, me opongo al desarrollo de la misma, como lo he hecho en contra del desarrollo de otros eventos (por las mismas razones obvias), como pueden ser ‘La Transvulcania’(que incumple normas de los Espacios Naturales Protegidos donde se desarrolla sin que se modifiquen las mismas año tras año), el Torneo Internacional de Pádel (que costó 100.000 euros de dinero público de los cuales no se recuperó ni la mitad con la venta de entradas, entradas que para muchos palmeros es un lujo inalcanzable) o de tirar ‘Enanos’ para crear un ‘Parque Submarino’, con su alto coste económico, pagado del erario público, y del todavía proyecto de Playa de la capital, con un retraso injustificable y un sobrecoste de 1 millón de euros asumido por el propio Cabildo, nadie discute que son ideas interesantes, pero cuando entra en juego el dinero de todos , pues deberíamos opinar y hasta decidir entre todos.

Y ya que La Palma es una isla de artistas, propongo que se tengan en cuenta lugares como la Avenida Marítima, donde se pueden plasmar ideas como la de Don Luis Morera, o abrir un concurso público.

También sencillas ideas pueden ayudar a fijar puntos turísticos y de disfrute, y se pueden desarrollar con bajo presupuesto, contando con artistas locales y movimientos culturales.

Pongo como ejemplo ‘La Rapadura’ en el Barranco de Las Nieves, donde, si el Patronato quiere, se podría realizar en unas semanas, una obra efímera, cubriendo con papel celofán la estructura de piedra, y adornar el lugar con picón, piedras y flora autóctona, y también se podrían pintar con murales las paredes del túnel anexo, por donde pasarán miles de visitantes.

Volviendo al tema de Ibarrola, decir que por lugares alternativos donde hacer su obra, o hacer una obra ‘extra’, que no sea, tenemos un mamotreto de aeropuerto, otro de La Marina, prismas por doquier, casonas públicas abandonadas en La Laguna de Barlovento, Los Molinos de Bellido deslucidos… ¡Y hasta la propia Rapadura!

Seguramente los artistas locales y numerosos voluntarios participarían de buen agrado. O al menos, ya que hoy se clausura su exposición en la Casa Salazar, realizar alguna mesa redonda explicando lo que no ha quedado claro, a la que se invite, entre otros, Don Anselmo Pestana y Don José Luis Perestelo, futuros socios de Gobierno, y al parecer con posturas enfrentadas, todo sea por la concordia.

Solo me queda agradecer a los lectores su paciencia y que entre todos participemos en el desarrollo de un nuevo Plan Territorial Especial turístico, necesario para la isla, y de otros asuntos que afectan a la isla como pueden ser: ‘El rabo de gato’ del que hoy se hacen congresos pero no se invierte en controlarlo, de los montes llenos de pinillo y la sub-contratación temporal y precaria del servicio de Prevención y Extinción de Incendios Forestales, de no tener un punto de Inspección Fronteriza eficiente que ponga freno a las plagas que entran , o de no tener una Facultad de Ingeniería de Montes en toda Canarias, o del incumplimiento con los compromisos adquiridos en materia de energías renovables, o de los alimentos transgénicos que nos venden las cadenas de supermercado, de la extracción de petroglifos de su lugar natural para exponerlos en un museo, de seguir construyendo astrofísicos con dinero público, de no tener un Plan de Residuos y seguir enterrando la basura, de no mejorar el servicio de transporte público fuera de las ciudades, de la propiedad del agua y de embalses rotos, del uso de plaguicidas en la agricultura y el aumento de enfermedades, del uso de los herbicidas en una Isla Reserva de la Biosfera, del arruí en La Caldera, de las tradicionales riñas de gallos que reciben subvenciones públicas, de las maniobras militares con sónar en aguas de Canarias, del cuartel de la OTAN…

En fin, desearles que La Luna menguante de esta noche no merme la capacidad de reflexión, lucha contra las injusticias y construcción de una sociedad mejor.