El presidente de Nueva Canarias (NC), Román Rodríguez, aseguró que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2013 “no se los cree nadie” porque tienen unas previsiones macroeconómicas “demasiado optimistas y fuera de la realidad”.
En un comunicado, el máximo dirigente de NC citó como ejemplo de ese excesivo optimismo de las cuentas estatales la previsión de lo que retrocederá la economía española en el próximo ejercicio, un -0,5%, a pesar de que no hay ni un solo analista que no coloque el decrecimiento por encima del -1,3% del Producto Interior Bruto español.
Rodríguez aseguró así que cuando “se equivocan en la previsión de retroceso de la economía, se equivocan en los ingresos previstos y en la tasa de desempleo”.
Tampoco consideró creíble que el paro vaya a reducirse en tres décimas en 2013, “porque no lo dice nadie que no sea el Gobierno”, mientras que no se fía de que vaya a darse la previsión de ingresos que recoge el presupuesto “porque está asociada al crecimiento y el previsto es irreal, una situación a la que se añade una inflación superior al 3%”.
A la espera de conocer con más detalle las cuentas estatales, NC valoró que se trata de un presupuesto “que genera desconfianza y recesión”, como se demostró ayer con la subida de la prima de riesgo y la caída de la bolsa, porque los mercados no se fían de estas cuentas.
En este sentido, el presidente de NC criticó que en las cuentas para 2013 “persisten los recortes en gasto e inversión”, y que se reducen entre un 8% y un 10% las aportaciones a las comunidades autónomas, mientras que “lo único que se incrementa de forma notable” es el dinero al pago de la deuda, 10.000 millones de euros, un 25% más, que se destina a pagar los intereses a los mercados financieros.
“Sin embargo, el Partido Popular sigue aplicando la tijera al gasto social y las inversiones y seguro que ”no podrá cumplir con la revalorización de las pensiones“, agregó.
“Además -concluyó- no hay políticas de estímulo de ninguna naturaleza que hagan pensar que el ciclo económico pueda modificarse mínimamente, en cuanto a las reformas estructurales. Lo que viene a poner de relevancia que el Gobierno de Mariano Rajoy no está dirigiendo el proceso económico y político sino que, por el contrario, está empeorando el problema”.