Desde Plena inclusión Canarias queremos dar una respuesta pública al artículo de opinión publicado en este medio de comunicación el pasado 28 de enero, escrito desde la Asociación de Discapacitados Físicos de La Palma (Adfilpa).
Entendemos que la percepción de Adfilpa respecto al evento de la Romería Inversa, organizada por el Colectivo de Arquitectura y Urbanismo Zuloarck, contando con la financiación del Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma y la colaboración de Plena Inclusión Canarias, es debida a la falta de información respecto al proyecto y su finalidad social.
La Romería Inversa es un proyecto que, desde su inicio, ha estado vinculado a la Bajada de la Virgen de Las Nieves. Es por esto que su culminación se realiza en la misma trayectoria de dicha bajada.
Asimismo, la isla de La Palma, que además cuenta con una orografía especialmente compleja, no siempre dispone de espacios accesibles que cumplan con la normativa de accesibilidad correspondiente. Igualmente, queremos destacar que acudieron a gran parte del mencionado evento (organizado en la plaza del Santuario de la Virgen de Las Nieves) personas con discapacidad física de otra entidad que sí pudieron participar en la presentación y cierre final del proyecto. Plena Inclusión Canarias nunca anunció actividades de ocio durante el tiempo de la bajada para las personas que se encontraban en la plaza, al contrario de lo que Adfilpa difundió en prensa, radio y redes sociales.
Nuestra entidad siempre ha abogado, y lo seguirá haciendo, por promover la participación y los derechos de todas las personas con discapacidad, y especialmente de las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo. Por esta razón decidimos sumarnos a esta iniciativa, dado que la misma sería positiva para el colectivo de personas con discapacidad intelectual o del desarrollo, colectivo al que dirigimos nuestra intervención y compromiso. Este fue el motivo por el que participamos en la culminación de un proyecto fabuloso que ha sido desarrollado durante varios meses con mucha ilusión y esfuerzo por parte de todas las personas participantes.
Por último, aclarar que con este artículo de opinión hemos querido apelar a nuestro derecho a réplica, compartiendo nuestra percepción respecto al evento. Una vez aportada esta respuesta, seguiremos prestando toda nuestra atención y esfuerzo a lo esencial: apoyar y ofrecer oportunidades a las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo, y a sus familias, tal y como venimos haciendo desde hace más de 30 años.
En Las Palmas de Gran Canaria, a 10 de febrero de 2020