Hasta hace poco más de tres meses era un joven más, un profesional liberal que intentaba hacerse un hueco en el duro mundo de la abogacía. Ahora, con tan solo 26 años, ha asumido una gran responsabilidad. Jordi Pérez (Los Llanos de Aridane, 1988), licenciado en Derecho, es consejero del Cabildo por Coalición Canaria (CC) de Promoción Económica, Comercio y Empleo y también consejero delegado de la empresa pública Sociedad para el Desarrollo Económico de La Palma (Sodepal), “una papa caliente”, reconoce en tono de humor en una entrevista con LA PALMA AHORA. “Cuando me encomendaron estas área me dio miedo, sentí vértigo, porque tengo 26 años y sé que la experiencia es muy importante, pero creo que soy un ejemplo de que están cambiando las cosas en La Palma, porque es la primera vez que en la Isla una persona con 26 años asume estas responsabilidades”, subraya. Asegura que lo dará todo para lograr el progreso de la sociedad palmera. “Me lo tomo todo con mucha responsabilidad, y estoy dispuesto a trabajar las horas que haga falta, empezar a hacer política de una forma diferente, no porque me considere mejor sino porque mi generación es totalmente distinta a la que ha estado gobernando hasta ahora”, apunta. “Soy una persona normal que ha tenido una gran oportunidad para estar al frente de la administración pública y que intenta imprimir la impronta de la juventud, de una generación que ha vivido cambios absolutos”, explica.
Jordi Pérez es el consejero más joven de la Corporación insular y se siente orgulloso de ser “alguien que cuente en La Palma y que no ha abandonado su isla”. “Es más cómodo obviar a realidad, o pasar de puntillas sobre ella, que hacerle frente, pero tenemos que estar comprometidos con esa realidad insular”, afirma.
Promoción Económica de La Palma
La línea básica de la política de las áreas que coordina se centra en “continuar en la búsqueda de sendas de mercado, nichos de trabajo para las empresas, la creación de pasarelas que puedan ser ocupadas posteriormente por la empresa privada”, detalla. “La función de Sodepal es crear nuevo nichos de mercado que puedan ser ocupados por la empresa privada”, reitera. “Con esa filosofía estamos manteniendo las reuniones necesarias para la configuración de un presupuesto que nos permita el posicionamiento empresarial de Sodepal en mercados de mayor consumo, de mayor demanda, plataformas empresariales a nivel nacional que posibiliten el cruce entre la oferta y la demanda para poder dar lugar a nuevos posicionamientos empresariales que puedan ser aprovechados por las empresas de La Palma”.
Sodepal: “Una papa caliente”
Jordi Pérez, a pesar de su juventud, recurre al refranero popular. “Desde pequeño siempre me han dicho que el clavo que más martillo lleva es el que más sobresale”. A continuación se explica: “Sodepal es la ‘papa caliente’ por la trayectoria que ha tenido hasta aquí, con una gestión en algunos momentos que no ha sido la más correcta, y asumo las culpas que le corresponden a las siglas que represento; pero la trayectoria de Sodepal ha cambiado, ha ido hacia la vía más adecuada para la cual fue creada, que es la función social, la función de crear nichos de trabajo para la empresa privada a través de una empresa pública, realizar una función social que tenga trayectoria y trascendencia en nuestra economía”, remarca. “Es muy fácil someter a Sodepal a críticas porque tiene un pasado y ese pasado pesa”, admite.
Rechaza las críticas que viene formulando el Partido Popular sobre la gestión de Sodepal. “El PP también forma parte del consejo de administración, y lo que este consejero echa de menos es que haga propuestas, porque lo habitual es criticar en la prensa”. “El PP lo tiene fácil, pero es triste lo que está haciendo, porque Sodepal es un proyecto, una herramienta con una función social, y son treinta y pico trabajadores los que se ven sometidos a sus críticas infundadas; le resulta fácil hacer oposición en este tema”. “Hay muchas cosas que mejorar en Sodepal; tampoco yo estoy de acuerdo con el actual modelo”, afirma. “Unas de las cosas que tiene que hacer Sodepal es abanderar la comercialización de productos palmeros fuera de la Isla y fuera incluso de Canarias, y eso lo tiene que empezar a hacer ya”.
Colaboración con los agentes sociales en empleo
Aunque el Cabildo tiene “competencias residuales” en materia de empleo, Jordi Pérez quiere cambiar las políticas que se han venido desarrollando hasta ahora. “Estamos empezando a hacer por primera vez una función de mayor colaboración social entre todos los agentes implicados para intentar que nuestras acciones sean más eficaces y eficientes”, recalca. “Nuestro objetivo es contar con todos los agentes sociales, con todos los elementos que engloban la sociedad y que están en contacto con el demandante de empleo”. “Se trata de acciones conjuntas entre el ámbito social, el empresarial y el desempleado, para conseguir enfocar de la forma más correcta cualquier acción directa, sea un plan activo o pasivo”. “Partimos de la base que tenemos competencias y recursos muy limitados, pero queremos que esos recursos lleguen de la mejor forma posible al sujeto que más lo necesita”. El consejero aboga por hacer “políticas más sociales, contando realmente con quien lo necesita para mejorar sus circunstancias”. Adelantó que se va constituir la primera Mesa de Trabajo por el Empleo en la que “contaremos con los agentes sociales y organizaciones no gubernamentales como Cruz Roja y Cáritas”. En definitiva, Pérez persigue “un sistema más colaborativo y participativo, que esté en contacto directo con el demandante de empleo y que pueda aportar su vivencia y su experiencia para que los planes puedan enfocarse a las necesidades que se han detectado”.
Elogio a la capacidad del palmero
En el contexto regional, Jordi Pérez reconoce que La Palma está estancada. “La realidad es la que es, contamos con una población flotante real que no creo que llegue a 60.000 habitantes. Es significativo que aunque de derecho podemos tener entre 84.000 y 90.000 habitantes, la realidad del consumo no llega a 60.000, y eso manifiesta que tenemos un problema, pero que tiene una solución que pasa por aprovechar el intelecto y la capacidad de generación que tiene el palmero”. “El palmero es una persona orgullosa y capaz de luchar con lo poco que tiene, con cuatro elementos monta un gran imperio, lo ha demostrado siglo tras siglo y crisis tras crisis; tiene capacidad, tiene herramientas, lo único que necesita es que lo organicen para que sea capaz de desarrollarse”.
Se muestra en contra de “hacer un desarrollo para la Isla sin contar con los palmeros”. “Hay que tener en cuenta las circunstancias de la Isla a la hora de trazar políticas para su crecimiento; me abruma y me crispa escuchar que tenemos que definir cuál debe ser el modelo económico y turístico de La Palma, porque eso está más que definido, porque la realidad está ahí, hay que potenciar lo que tenemos y cambiar lo que no funciona; hacer un desarrollo único para La Palma”, concluye.