Más de 50 personas con discapacidad mayores de 21 años disfrutan durante el presente mes de agosto del programa de integración Verano sin barreras de la Consejería de Asuntos Sociales del Cabildo de La Palma, que pone a su alcance terapias de rehabilitación, animación en la playa y baños adaptados en el mar, se indica en una nota de prensa de la primera Corporación.
El presidente del Cabildo, Anselmo Pestana, acompañado por la consejera de Asuntos Sociales, Jovita Monterrey, realizó una visita a la playa de Bajamar, en Breña Alta, donde ambos constataron los beneficios de este proyecto, cuyos servicios desarrolla la organización Cruz Roja.
“Que Verano sin barreras haya llegado a diez ediciones es un síntoma inequívoco de que el Cabildo está trabajando en la senda correcta por y para la integración de las personas con discapacidad, ofreciéndoles servicios de calidad y permitiendo un tiempo de respiro a sus familias y cuidadores o acompañantes habituales”, señala Anselmo Pestana.
La consejera de Asuntos Sociales, Jovita Monterrey, destaca que cada verano aumenta la demanda y el número de personas que acceden a la iniciativa. “Estamos ante un recurso de éxito y de muy buena acogida. Si no fuera por un programa como éste, a la mayoría de las personas usuarias no les sería posible disfrutar del mar y de la playa en verano, motivo por el cual desde el Cabildo nos sentimos muy satisfechos de su desarrollo”, afirma.
En representación de Cruz Roja, Saray Pérez asegura que “Verano sin barreras es muy especial, ya que las personas usuarias están esperando con muchas ganas todo el año a que llegue agosto y el equipo de monitores, voluntariado y coordinación también deseamos que llegue este mes para disfrutar con ellos y tener una sonrisa más grande en verano”.
Verano sin barreras, se explica en la nota, se desarrolla en las playas de Bajamar, en Breña Alta, y Puerto Naos, en Los Llanos de Aridane. Permite a sus participantes disfrutar de baños en el mar, que para el colectivo de personas discapacitadas suponen una importante función terapéutica y rehabilitadora.
El programa se desarrolla con el trabajo de un coordinador en cada playa, cuatro monitores de ocio y tiempo libre, un auxiliar de enfermería, un fisioterapeuta y una media de cuatro personas voluntarias en cada zona de baño, que se encargan del transporte adaptado y del apoyo en las playas
El programa también contempla un programa de actividades complementarias de tipo cultural, lúdico-deportivas adaptadas, manualidades, dinámicas de grupo e integración, juegos, servicio de fisioterapia y rehabilitación en el agua y en la arena y apoyo para el baño adaptado en el mar.