La Asociación Salud Mental La Palma inicia este lunes el Servicio de Refuerzo de Seguimiento Académico que nació en 2003 y que se ha afianzado, convirtiéndose en esencial tanto para las familias como para los docentes, informa María de la Paz Magdalena, responsable de la entidad.
En esta ocasión y financiado por el Área de Educación del Cabildo Insular de La Palma, el proyecto se focaliza a los alumnos y alumnas de los pueblos y colegios afectados por el volcán de Cumbre Vieja, concretamente en los centros docente de Los Campitos y Todoque.
“En estos centros venimos trabajando de manera continua desde el año 2004 por lo que en estos momentos y como profesionales que trabajamos en el ámbito de la salud mental creemos, dada la situación, que parte del alumnado presentará dificultades de aprendizaje y fracaso escolar, especialmente en las áreas instrumentales básicas, y que van a requerir ciertas medidas extraordinarias de atención que respondan a las necesidades educativas que presentan, desde un marco de actuación lo más normalizado posible”, explica.
“Las actividades a desarrollar en el proyecto se centran en la adecuación de herramientas de aprendizaje y también a la atención a posibles secuelas que se hayan podido vivir por la
catástrofe de la erupción del volcán en la zona conocida como Cumbre Vieja en la isla de La
Palma. Las secuelas económicas, como son perder el hogar, la economía familiar etc., significa un gran estado de shock para dichas familias y los niños“, subraya.
“Pretendemos dar apoyo educativo una vez que los escolares regresen a escolarización o en el proceso de su vuelta a ella, en este compás de espera, para que no se pierda en lo posible lo que es el desarrollo académico de los menores”, dice.
Los objetivos del servicio pretenden:
ï· Contribuir a la prevención de las dificultades de aprendizaje de del alumnado.
ï· Hacer hincapié en alguna dificultad que pueda condicionar los aprendizajes de las
materias instrumentales básicas.
ï· Luchar contra el fracaso escolar
ï· Reforzar los procesos de aprendizaje, apoyando directa e individualizada mente a los
menores (en período de escolaridad obligatoria) en sus tareas, aportándoles técnicas y
hábitos de estudio, que mejoren sus competencias cognitivas y su rendimiento escolar.
ï· Estimular aquellos factores que conducen a un desarrollo positivo; y a la vez, disminuir
factores que pueden poner en riesgo o que pueden obstaculizar un desarrollo psicosocial
positivo. Estos factores pueden ser aplicados a nivel individual y familiar.
ï· E intentar la no aparición de secuelas futuras dada la situación traumática
y desconocida por todos, en donde se hace difícil incluso para los mayores comprender
y adaptarse a unos acontecimientos que desbordan a la sociedad en general.