La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), en una nota de prensa, señala que “con fecha 12 de septiembre se remitió escrito de queja del Comité de Empresa a la Gerencia del Consorcio de Servicios de La Palma al haber llegado a su conocimiento que María Nieves Rosa Jesús Arroyo Díaz, consejera delegada del PSC-PSOE, entre otras áreas, del Consorcio y responsable del área de Servicios Públicos del Cabildo de La Palma, convocó masivamente a los trabajadores del Consorcio de Servicios de La Palma (recogida de residuos sólidos) a una asamblea para el día 14 de septiembre a las 17.30 horas a espaldas del Comité de Empresa y del sindicato mayoritario en el centro directivo, al parecer, para tratar temas de carácter laboral”.
Por parte del sindicato, indica, “se tiene constancia de que no es la primera vez que se ningunea a la representación de los trabajadores y al sindicato mayoritario en la empresa, vulnerándoles sus derechos constitucionales que merecen una enérgica reacción que erradique tales conductas antisindicales”.
La CSIF, añade, “agradece al 90 % de la plantilla que no haya secundado tal anómalo llamamiento, toma nota y los invita a participar en la nueva hoja de ruta negociadora de cara al período 2022-2026”.
Apunta que “aunque nunca tuvo dudas de ello, CSIF agradece a la inmensa mayoría de la plantilla que no haya acudido a la encerrona y haya entendido que el cauce de negociación colectiva debe realizarse con el Comité de Empresa y con los sindicatos en el foro de negociación correspondiente, y no a través del uso de redes sociales (Facebook o Twiter), ni de asambleas informativas al margen de la mayoría sindical; y no ponemos a trabajar para la nueva hoja de ruta negociadora de cara al período 2022-2026”.
Señala que “nos consta que existen numerosas quejas por el funcionamiento del servicio de recogidas de residuos sólidos, aunque la situación no es imputable en modo a los trabajadores, sino a la deficiente gestión realizada, a pesar del aumento de personal y de presupuesto para atender el servicio”.
“Unido a lo anterior”, agrega, “hay que mencionar el irrespirable ambiente laboral motivado por la modificación unilateral de los cuadrantes de servicios que impiden que el personal pueda disfrutar de su derecho al descanso, y la imposición de cargas de trabajo inasumibles con el personal existente actualidad. Lo que ha motivado sin duda las numerosas solicitudes de excedencia voluntaria de los trabajadores, que prefieren cambiar de empresa, a trabajar en tales condiciones”.
Y finalmente, concluye, “hay que reprochar la inaceptable represión que se realiza a los trabajadores con numerosos expedientes disciplinarios y la absoluta arbitrariedad a la hora de tomar decisiones, dependiendo de quién solicite permisos, o solicite adaptación de jornada por razones de conciliación familiar, o asignación de turnos de trabajo”.