El Área de Salud de La Palma, adscrita a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, ha atendido, en el marco del programa específico de evaluación y atención psicológica puesto en marcha el pasado mes de febrero para atender a las personas afectadas por la erupción volcánica de Cumbre Vieja, un total de 136 interconsultas de psicología clínica. El plan específico está incluido en la Estrategia Sanitaria de Actuación Inmediata para la isla de La Palma, en el marco del Plan Especial para la Reconstrucción de La Palma, informa el citado departamento.
Este servicio, dependiente dela Unidad de Salud Mental de Los Llanos de Aridane, atendió a los pacientes derivados por parte de los especialistas de Medicina Familiar y Comunitaria de los centros de salud de Los Llanos de Aridane, El Paso y Tazacorte, localidades más afectadas por la erupción.
Los diagnósticos más prevalentes detectados entre estas personas han sido reacción ansioso depresiva, trastorno adaptativo con predominio de alteración de otras emociones, trastorno mixto ansioso-depresivo y trastorno por estrés postraumático.
La sintomatología principal que presentaban estos pacientes en las entrevistas de evaluación y diagnóstico con los especialistas ha sido ansiedad, depresión, clínica postraumática, como síntomas de intrusión, evitación persistente de estímulos asociados a la erupción volcánica, hiperactivación o alteración del sueño, y síntomas disociativos, fundamentalmente despersonalización o desrealización.
Los especialistas en psicología clínica de la Unidad de Salud Mental de Los Llanos de Aridane explican que los factores de riesgo que se asocian a mayor gravedad sintomática han sido el desplazamiento prolongado de la vivienda, la pérdida de viviendas y tierras de cultivo y la vivencia subjetiva de trauma.
Atención psicológica durante y tras la erupción
Si bien no se ha registrado un incremento de patologías de Salud Mental, sí ha habido una mayor demanda por asistencias relacionadas con cuadros de ansiedad y depresión por la inestabilidad de la situación que ha generado la erupción volcánica entre la población residente en las zonas más afectadas.
Para dar asistencia a estos cuadros psicológicos agudos, el Servicio Canario de la Salud reforzó la asistencia de Salud Mental desde el inicio de la crisis volcánica, con la puesta en marcha de un dispositivo de asistencia de Salud Mental periódica para las personas realojadas en los mismos hoteles y se reforzó a los profesionales de Salud Mental de la isla.
Además, se puso en marcha una consulta de psicología clínica para los tres municipios afectados, en coordinación con los médicos de familia y un servicio de atención domiciliaria en Salud Mental con una trabajadora social y personal de Enfermería de refuerzo.
La Gerencia de Servicios Sanitarios del Área de Salud de La Palma se mantiene expectante ante los posibles cambios en la demanda asistencial que pueda surgir en este sentido para poder dar respuesta adecuada.