Nadie ha dicho que hacer un anuncio sea sencillo. Hay que realizar un brief, contrabriefing, desarrollar estrategia a seguir, buscar idea creativa, buscar una productora... pero ¿qué ocurre cuando el presupuesto es limitado y/o las ideas no son tan originales como deberían?
En el primer caso, se recurre a bancos de imágenes como Shutterstock, morgueFile o Gettyimages. Aunque siempre se corre el peligro de coincidir con otras marcas los costes de producción son mínimos.
Este verano hemos tenido la posibilidad de ver a dos grandes enseñas recurrir al mismo banco de imágenes y es que, cada vez más, las empresas apuestan por reducir costes y es aquí cuando surge el problema. Destinia y la ONCE han querido llevarnos al mismo entorno paradisiaco de aguas cristalinas... ¡Con lo bien que se está en Canarias!
Campaña publicitaria de la ONCE
Campaña publicitaria de Destinia
En un segundo caso y haciendo referencia a la falta de originalidad, son muchos los anunciantes que pecan de fijarse demasiado en otras empresas.
Marketing Directo se ha hecho eco de varios casos de imitación. En el Festival de Cannes de este año se creó cierto revuelo por el parecido de las campañas de Super Cola Tekbom y Pattex. ¿Sabrías encontrar las diferencias? Bromas aparte, la línea creativa es casi idéntica. Lo suficiente como plantearse entregar un premio a la campaña más reciente.
Otra caso de calco (Marketing Directo) ha sido la campaña que Premiere Estates Wine ha lanzado bajo el slogan “Taste the Bush” (sí, has leído bien). En este caso el perjudicado ha sido el fotógrafo español Chema Madoz.
Transportes de Londres (TFL) es otra marca que ha recurrido a vídeos ya conocidos. La prueba de atención selectiva realizada por Simons y Chabris en 1999 fue la inspiración para una campaña que pretendía evitar accidentes relacionados con los ciclistas.
Campaña publicitaria de Transportes de Londres (TFL)
Prueba de atención selectiva de Simons y Chabris
Está claro que tener una idea realmente original, que no haya sido previamente utilizada, es complicado. Como se dice, ya todo está inventado, aunque siempre nos sorprende alguna joya como el caso de “Dumb ways to die” que lanzó el Metro de Melbourne años atrás.
Desde tu punto de vista: ¿Estamos hablando de falta de originalidad en los trabajos realizados, comodidad o simplemente, falta de presupuesto?
Nadie ha dicho que hacer un anuncio sea sencillo. Hay que realizar un brief, contrabriefing, desarrollar estrategia a seguir, buscar idea creativa, buscar una productora... pero ¿qué ocurre cuando el presupuesto es limitado y/o las ideas no son tan originales como deberían?
En el primer caso, se recurre a bancos de imágenes como Shutterstock, morgueFile o Gettyimages. Aunque siempre se corre el peligro de coincidir con otras marcas los costes de producción son mínimos.