Las diferentes rutas de las pateras que conducen a España desde las costas de África se han cobrado en lo que va de año 1.255 vidas, de las que tres de cada cuatro, 937, corresponden solo a la ruta hacia Canarias, la cifra más alta desde que la Organización de Naciones Unidas para las Migraciones (OIM) comenzó recopilar estos registros, en 2014.
De acuerdo con el balance de víctimas a 3 de diciembre facilitado a Efe por el programa Missing Migrants (Inmigrantes Desaparecidos) de la OIM, desde enero han muerto o desaparecido intentando llegar a España en pateras o cayucos al menos 99 niños y 248 mujeres.
La OIM siempre subraya que sus balances de víctimas se basan en estimaciones de mínimos, porque solo incluyen las muertes en las que se ha recuperado el cadáver o aquellas otras que se produjeron en el mar, pero de las que hay testimonios de los supervivientes.
Sin embargo, añade, es consciente de que existen numerosos naufragios “silenciosos” que escapan a su estadística, porque no hay datos ni testimonios directos de lo ocurrido a esas pateras.
“En la OIM estamos extremadamente preocupadas por el aumento de víctimas en trayectos migratorios hacia España, particularmente en Canarias”, ha señalado a Efe una portavoz de Missing Migrants.
Las cifras a falta de 28 días para terminar el año son las siguientes: en la ruta Canaria han muerto 937 personas, un 7% más que en 2020 y un 363% más que en 2019, cuando empezó a reactivarse el tráfico de pateras en ella; y en las vías que cruzan el Estrecho de Gibraltar y el Mediterráneo hacia la España han perecido 318 personas, un 7% menos que en 2020 y un 42 % menos que en 2019.
Entre los muertos o desaparecidos documentados en lo que va de año, hay 248 mujeres (221 en la Ruta Canaria y 27 en el Mediterráneo) y 99 niños (83 en Canarias, el último este mismo jueves, un bebé de dos meses, y 16 en el Mediterráneo).
En lo que va de año, la OIM cifra en 20.148 las personas que han llegado en pateras, cayucos o neumáticos a Canarias. Si esa cifra se cruza con el balance de 937 víctimas, se observa que perece en el mar un inmigrante por cada 21 que llegan y, si se traslada al calendario, se aprecia un saldo de casi 3 fallecidos al día (2,78).
Los datos para las rutas del Estrecho de Gibraltar y el Mediterráneo son estos: 16.514 personas llegadas a las costas de la península, Ceuta, Melilla y Baleares en pateras, un muerto por cada 52 personas que alcanza la costa, una víctima por jornada (0,94).
Desde que la OIM recopila datos de víctimas en las pateras, la progresión de los muertos y desaparecidos en pateras rumbo a España ha sido la siguiente: 88 en 2014 (59 en el Mediterráneo y 29 en Canarias), 184 en 2015 (102 + 82), 297 en 2016 (128 + 169), 225 en 2017 (224 + 1), 892 en 2018, año de la última crisis migratoria importante en el Estrecho de Gibraltar (849 + 43), 754 en 2019 (552 + 202), 1.220 en 2020 (343 + 877) y 1.255 en 2021 (318 + 937).
En el caso de la Ruta Canaria, que desde 2020 concentra más de la mitad de las llegadas de pateras a España, los meses más mortíferos en lo que va de año han sido agosto, cuando se perdieron 380 vidas (doce diarias, o una cada dos horas), y junio, cuando hubo 258 muertes y desapariciones (8,6 diarias, una cada tres horas).
A mucha distancia se sitúan septiembre, con 87 muertes; abril, con 84; noviembre, con 40; marzo, con 23; y enero y octubre, con 22.