El presidente de la asociación Entre Mares, Marcos Rodríguez, ha reclamado este sábado unidad política para afrontar la crisis migratoria que afecta a Canarias, al tiempo que ha denunciado el incremento “exponencial” de fallecimientos de personas procedentes del continente africano en su intento por conseguir una vida mejor.
Rodríguez ha hecho estas declaraciones en el homenaje que se ha rendido a los nueve jóvenes procedentes de una zona rural de Marruecos, Guelmim, que perdieron la vida hace 25 años en la playa de Las Señoras, al sur de Fuerteventura, y que constituye el primer naufragio de la Ruta Canaria del que se tiene constancia.
Más de cuarenta personas, entre ellas la presidenta del Cabildo, Lola García, la subdelegada del Gobierno en Las Palmas, Teresa Mayans, y el secretario de la Federación de Asociaciones Africanas, Teodoro Bondyale, se han congregado en la playa, donde se ha depositado un ramo de flores en el monumento Ventana a la esperanza que la organización Entre Mares instaló en el décimo aniversario del naufragio.
Así mismo, han lanzado flores al mar como acto de homenaje a todas las víctimas de las fronteras del mundo.
Los miembros de la organización han pedido también que “no haya más cementerios ni tumbas sin nombres” y que se pongan los medios necesarios para identificar los cuerpos sin vida de los migrantes, así como que se refuercen las unidades de salvamento en la Ruta Canaria.
La subdelegada del Gobierno en Las Palmas ha calificado de “vergüenza” que el PP no se sumara esta semana a la aprobación de la propuesta de ley para modificar la Ley de Extranjería y que las comunidades, sobre todo las gobernadas por el PP, no sean solidarias con la acogida de menores inmigrantes no acompañados.
Y ello, ha recalcado, por tratarse, precisamente, de niños y adolescentes que se encuentran en Canarias, donde los centros están desbordados, lo que impide prestarles la atención debida.
Fuerteventura conmemora estos días el 25 aniversario del primer hundimiento de una patera en aguas canarias, un naufragio que se saldó con la muerte de nueve jóvenes, entre ellos un menor de 15 años, tras chocar la barquilla con una roca.
Los supervivientes aseguraron haber pagado 4.000 dirhams, unas 70.000 pesetas, por subirse a una embarcación de apenas seis metros de largo con un motor de 15 caballos.
Según la ONG, Caminando Fronteras 4.808 personas fallecieron en la ruta atlántica hacia Canarias durante los cinco primeros meses de 2024.