VALENCIA, 05 (EUROPA PRESS)
El auditor de Forever Young, Arturo Alfonso Cenjor, ha asegurado en su declaración ante el jurado que juzga al expresidente de la Generalitat Francisco Camps y al exsecretario general del PPCV, Ricardo Costa, por un delito de cohecho pasivo impropio en la 'causa de los trajes', que todas las facturas falsas que detectó en la tienda con conceptos que no se correspondían con lo que se vendía en el establecimiento obedecían a ventas reales.
Según ha dicho, eran facturas falsas “disfrazando” ventas reales cree que con el fin de que las empresas pudieran desgravarse el IVA. El perito ha apuntado que su despacho, Cenyval, tiene un contrato de servicios con Forever Young y su empleada, Raquel Vázquez, está en el establecimiento desde 2004 ya que anteriormente había trabajado con el dueño de la tienda, Eduardo Hinojosa. Al respecto, ha confirmado que cuando le citaron para el juicio se reunió con ambos, aunque ha negado que le dieron instrucciones.
El auditor ha explicado inicialmente que realizó un informe de 13 de mayo de 2009 porque se lo pidió Hinojosa que quería ver la situación en la que se encontraba el establecimiento a raíz de que el sastre José Tomás pidiera una factura a nombre de Orange Market por importe de 4.040 euros. En su informe, ha explicado que reflejó anomalías formales y facturas que incluían conceptos que no se vendían en la tienda, por lo que las califica de falsas, aunque sí que recogen operaciones de venta reales.
Sin embargo, aunque en un primer momento de su declaración lo ha negado, ha reconocido, a preguntas de la acusación popular, que el informe también iba dirigido a ser incluido en la denuncia de Hinojosa contra el sastre con motivo de su despido, y en la que se alegó la existencia de facturas falsas.
El auditor ha explicado que nadie sabía de la factura que pedía Tomás, aunque les dijeron que en el sótano de la tienda había un archivador del que salió este documento y otros más. Según el perito, tanto Hinojosa como Raquel Vázquez le contaron que el encargado de la tienda Javier García lo sabía y había afirmado que Tomás ordenaba hacer facturas con conceptos que no se vendían allí. El perito supone que era para que Orange Market se pudiera deducir el IVA y el Impuesto de Sociedades.
SIN DEVOLUCIONES
“Siempre se correspondían a ventas reales pero el cambio tenía por objeto la deducción del IVA”, ha dicho el perito, al tiempo que ha afirmado que examinaron los extractos para ver los ingresos y no consta ninguna devolución en el flujo económico. Asimismo, ha señalado que no existía fichas de clientes, excepto en las ventas pendientes de cobro, y ha explicado que, a pesar de que se pague en efectivo, debe haber ticket de venta aunque no lleve nombre.
Preguntado por si el hecho de que no haya documento de venta es porque no se pagó en efectivo, ha manifestado que se puede abonar y haber ticket pero no se sabe quién lo ha pagado. En todo caso, debe existir un ingreso en la caja por ese importe.
Interpelado por ese documento a nombre de Orange Market con el importe 4.040 euros que había solicitado Tomás, ha señalado que Javier García le dio unos tickets de venta, que ha examinado, y, preguntado por qué en estos casos no se aportó el recibo de pago, ha señalado que fue porque estaba pagado por transferencia. En todo caso, ha incidido en que le encargaron “revisar” las facturas y no comprobó si había documentos de pago y tickets.
Al respecto, ha negado al escrito validez mercantil y ha indicado que no casaban las facturas “exactamente con los tickets” porque “igual hay tres tickets de venta que se unen a 10 facturas”.
'DOCUMENTO 71'
También ha sido preguntado por el 'documento 71', el listado de deuda de supuestos clientes de Forever Young --entre ellos los de los acusados Camps y Costa, y los de algunos responsables de la trama-- asociados en manuscrito --con letra de Javier García, cree-- a diferentes transferencias, y ha señalado que los 30.000 euros que figuran en él fueron íntegramente pagados de esta forma y soportados con facturas que obedecen a ventas reales. No obstante, ha dicho que se trata de un “fax” y “nada más”.
Dentro de este documento, ha sido preguntado por una transferencia de 9.467 euros de Diseño Asimétrico y ha indicado que relacionó un recibo de venta con tres facturas que soportaban tickets a nombre de 'Camps nuevo cliente' y Álvaro Pérez. “Que coincidan las personas no lo puedo garantizar. Yo no sé si 'Camps nuevo cliente' pueda ser Francisco Camps”, ha dicho y ha afirmado que no examinó en el sistema informático para comprobar a quién correspondía.
Preguntado por el letrado del exjefe del Consejo valenciano, Javier Boix, ha asegurado que no existe ningún dato para identificar que esos más de 9.000 euros fueran para pagar los 5.000 atribuidos en ese documento a Camps, y ha añadido que tampoco le han dado documentación de que existan prendas que se correspondan a esa cantidad.
SALDADOS GLOBALES
Asimismo, ha indicado que de esos dos documentos analizados y en el conjunto del material examinado, no ha podido identificar importes exactos a pagos realizados por alguna persona para prendas adquiridas por Camps ya que “siempre” se han saldado “globales” y que tampoco consta ningún documento en el que el exjefe del Consejo valenciano se haya llevado una prenda autorizando a que otro la pague. Del mismo modo, carece de datos del por qué se atribuyeron 5.000 euros a Camps.
En relación con Costa, ha negado la existencia de ningún pago directo por 4.920 euros a su nombre en el 'documento 71', y ha asegurado que tampoco ha examinado ningún ticket de venta a su nombre ni pendiente. Al ser interpelado por esa cantidad, ha dicho desconocer si el diputado ha encargado alguna prenda ni que conste documentos de que se le haya regalado algo.