El PSOE y el PP empatarían en las elecciones europeas del próximo 7 de junio, al lograr ambos 23 escaños, aunque los socialistas superarían ligeramente a los populares en porcentaje de voto, al sumar el 42,8% de las papeletas, frente al 42,2% que conseguiría el PP, según el sondeo elaborado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sobre los comicios europeos.
El estudio, publicado este jueves y que tiene un margen de error de más/menos dos por ciento, se basa en un total de 4.692 entrevistas personales y domiciliarias realizadas en 372 municipios de 50 provincias entre el 29 de abril y el 17 de mayo, es decir parte del trabajo de campo se realizó coincidiendo con las dos primeras jornadas del Debate sobre el estado de la Nación.
En las elecciones del 7 de junio, los españoles elegirán 54 eurodiputados, igual que en 2004, pero sólo tomarán posesión inmediatamente los 50 primeros, ya que los otros cuatro lo harán cuando entre en vigor el Tratado de Lisboa. Sin embargo, el CIS ha realizado su estimación teniendo en cuenta únicamente al medio centenar de eurodiputados que entrarán primero en la Eurocámara.
Según este sondeo, el PSOE lograría 23 escaños, frente a los 25 sobre 54 con que cuenta actualmente. Los socialistas se anotan un 30,7% en voto directo, un porcentaje que el CIS eleva hasta el 42,8% tras realizar sus estimaciones. En 2004 los socialistas obtuvieron el apoyo del 43,46% de los electores que ejercieron su derecho al voto.
El mismo número de escaños que el PSOE lograría el PP, que ahora tiene 24 representantes de 54 en la Cámaras con sedes en Bruselas y Estrasburgo. En voto directo el PP sumaría el 23,7% de los votos, mientras que el CIS le concede una estimación del 42,2%, seis décimas menos que el PSOE y un punto más que el 41,2% de votos que cosechó en 2004.
Coalición Por Europa', que agrupa a CiU, PNV y Coalición Canaria, sumaría el 5,1% de los votos que se traduciría en dos escaños. En los comicios de hace cinco años los nacionalistas catalanes y vascos se presentaron en la coalición Galeusca, junto con el BNG, que ahora ha cambiado de socios. En aquellas elecciones Galeusca obtuvo dos eurodiputados y el 5,1% de los votos, el mismo apoyo que le augura el CIS, con lo que la llegada de los nacionalistas canarios compensaría la salida de los gallegos.
En estas elecciones el BNG concurre en la coalición Europa de los Pueblos-Verdes, junto con ERC, Aralar, Eusko Alkartasuna y la Chunta Aragonesista. La encuesta pronostica que esta plataforma soberanista tendrá un representante en el Parlamento Europeo y el 3,6% de las papeletas. En 2004 esta candidatura ya tenía un escaño, gracias al 2,4% de los votos que logró entonces, un porcentaje que ahora podría aumentar más de un punto gracias a la incorporación del BNG y Aralar.
Sin embargo, La Izquierda, la marca con la que concurren Izquierda Unida e Iniciativa per Catalunya Verds, sumaría el 3,1% de las papeletas y se quedaría con un único eurodiputado, frente a los dos que obtuvo hace cinco años cuando le dio su apoyo el 4,1% de los electores que votaron.
Unión, Progreso y Democracia (UPyD), que se estrena en unos comicios comunitarios sumaría el apoyo del 1,3% de los ciudadanos que acudirían a las urnas, pero no conseguiría representación, mientras que el 0,5% de los que acudan a las urnas optarán por otras candidaturas que también se quedarían fuera de la Eurocámara. Según la estimación del CIS, el 1,4% se decantará por el voto en blanco.
Más del 50% dice que irá a votar
Respecto a la participación, poco más de la mitad (53 por ciento) adelanta que irá a votar “con toda seguridad”, mientras que el 21,2% ve probable acudir a las urnas. Por contra, el 13,2% ya está totalmente instalado en la abstención y un 8% cree que no acudirá a las urnas. Con estos datos, el CIS pronostica una abstención segura del 13,2% que podría elevarse hasta el 21,2%. En 2004, la abstención fue del 54,86%.
De los que votarán seguro o con mucha probabilidad, el 66,4% ya tiene decidido su voto, mientras que el 32,2% aún está indeciso. Casi el 30% de estos últimos duda entre apoyar al PSOE o al PP, un 6% lo hace entre los socialistas e IU-ICV y un 1% entre el PSOE y UPyD, el mismo porcentaje de los que dudan entre el PP y el partido de Rosa Díez.
Entre la abstención o el voto al PSOE se sitúan 4,1 por ciento, mientras que un 1,1% no sabe si apoyar a los socialistas o votar en blanco. Son menos los que dudan entre quedarse en casa o votar al PP (2,1%) o entre respaldar a los populares o decantarse por el voto en blanco (1,1%).
Respecto a los pronósticos sobre quien ganará, el 31,5% cree que el PP se hará con la victoria, frente al 30,9%que augura que será para el PSOE. Sin embargo, son más lo que preferirían que ganasen los socialistas (37,8%) que los que desean que lo haga el PP (27,4%).
Sólo aprueban López Aguilar y Mayor Oreja
En cuanto a los candidatos a las próximas elecciones al Parlamento Europeo, sólo reciben el aprobado de los encuestados Juan Fernando López Aguilar y Jaime Mayor Oreja, pero el socialista, con una nota de 5,35, supera levemente al 'popular', con un 5,04.
Tras ellos se encuentra, el cabeza de lista de Europa de los Pueblos-Verdes, Oriol Junqueras (4,32); el de la coalición IU-ICV, Willy Meyer (4,17); el de Coalición por Europea, Ramón Tremosa (4,12), y el candidato de Unión, Progreso y Democracia, Fernando Sosa Wagner (3,77).
A pesar de la ligera ventaja que López Aguilar saca a Mayor Oreja, casi la mitad de los entrevistados (un 46,5%) no conoce al cabeza de lista del PSOE, frente al 13,9 por ciento que afirma desconocer quién es el 'número uno' de los populares a la Eurocámara.
A pesar de que más de la mitad de los encuestados creen que las decisiones que se toman en el seno de la Unión Europea afectan “bastante” a la vida de los españoles, un 61,3% sólo tendrá en cuenta los temas relacionados con la situación política actual de España para decidir el sentido de su voto.
De hecho, el principal motivo de los que acudirán a las urnas el próximo 7 de junio radica en las propuestas que las diferentes formaciones ofrezcan en relación con la política nacional, seguido por las iniciativas en relacionadas con cuestiones exclusivamente europeas.
La mayoría de los encuestados entiende la campaña europea en clave nacional y confiesa que, de no votar, sería principalmente para mostrar su descontento con la situación por la que atraviesa actualmente el país.
Por último, un 74,6 de los entrevistados asegura que la campaña electoral, que dará esta noche el pistoletazo de salida, influirá poco en el voto que emitirá el próximo 7 de junio porque ya tiene decidido a día de hoy su sufragio.