Huguet alerta de “conflictos juridicopolíticos” entre Cataluña y España

BARCELONA, 18 (EUROPA PRESS)

El consejero de Innovación, Universidades y Empresa de la Generalitat, Josep Huguet, ha alertado que Cataluña y España están en una fase en la que “los conflictos juridicopolíticos estarán al orden del día” tras la ley de Acogida y ha dicho que el Gobierno catalán “tiene que emparar la insumisión” jurídica.

En declaraciones a Rac1 recogidas por Europa Press, Huguet ha indicado que “la ideología dominante en la opinión publicada en Madrid tiene un tufo falangista” porque es “una visión imperialista”.

El consejero ha hecho estas afirmaciones después de que la Defensora del Pueblo, María Luisa Cava de Llano, recurriese ante el Tribunal Constitucional (TC) la ley de Acogida de inmigrantes aprobada por el Parlament en abril, que considera el catalán como primera lengua de acogida.

Para Huguet, se trata de “un choque de legitimidades”, por lo que “el Govern tiene que emparar la insumisión” jurídica, y ha argumentado: “Hay cosas que no se pueden aplicar y se tiene que ir hasta los tribunales, o hasta donde haga falta, para no aplicarlas. Después aquí habrá un conflicto juridicopolítico”.

El consejero ha sostenido que “la única forma de no volver atrás y de que la convivencia no se rompa, es incumplir sistemáticamente cualquiera sentencia de estas”.

Ha remarcado que “las personas y los derechos humanos están por encima de las leyes y de las constituciones y, si llega un momento en que las leyes son injustas, se incumplen”.

A juicio de Huguet, “instituciones de Estado que deberían ser neutras y arbitrar, como el Defensor del Pueblo, se utilizan como instrumento para aplicar un modelo de preeminencia de una lengua sobre otras”, algo que ha considerado “muy antidemocrático”.

Ha explicado que en el momento en que se elimina la palabra “preferente”, en relación a la lengua catalana en el Estatut, “se deja la puerta abierta a que te monten dos líneas escolares o que te impidan que sea la lengua de acogida de inmigrantes”.

“Nos quieren atar de pies y manos para que no podamos abordar un fenómeno tan complejo como la inmigración desde nuestras propias responsabilidades”, ha agregado.