El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó este martes que reclama y ofrece una “cooperación nacional” a fuerzas políticas y sociales para salir de la crisis económica y afrontar el “apremiante desafío colectivo” de la destrucción de empleo.
Durante su intervención en el pleno monográfico del Congreso de los Diputados sobre la situación económica, Zapatero apeló a este esfuerzo común de sindicatos y empresarios a través del diálogo social, a las comunidades autónomas, a los ayuntamientos y a las fuerzas políticas para acordar y agilizar las reformas y dar un impulso a los programas de transformación y desarrollo de sectores innovadores y de futuro.
A las comunidades autónomas, les ofreció que, junto con el Gobierno, se aborden y den respuesta a los problemas de sectores de actividad, principalmente la industria, en su impacto local, así como que se coordinen y fortalezcan políticas para evitar la exclusión social. A los ayuntamientos, les demandó que apliquen de manera “rápida y eficaz” el fondo de inversión municipal para el empleo.
También apeló a la sociedad española en su conjunto para atravesar este periodo de crisis, y volver a la senda de la prosperidad, “con un ejercicio de responsabilidad colectiva e individual”, haciendo un “singular esfuerzo de solidaridad”.
Zapatero, que comenzó su intervención recordando la cifra de desempleados según la última EPA (3.207.900 personas), afirmó que no hay nada en este momento que demande “más justificadamente” la conjunción de esfuerzos de las diversas fuerzas sociales y políticas que la destrucción de empleo. “Todo es poco para afrontar el combate que hemos de librar contra la destrucción de empleo en España”, subrayó.
Petición de colaboración
Por ello, lanzó una “petición de colaboración” dirigida a aunar esfuerzos e ideas ante el “apremiante desafío colectivo” que tiene la economía española: frenar la destrucción de empleo y situar cuanto antes a la economía española en condiciones de volver a crearlo como lo hizo hasta el año 2007.
Según Zapatero, esta oferta y petición de cooperación nacional se sustenta en cinco principios. El primero, prosiguió, es el compromiso del Gobierno de mantener y fortalecer la cohesión social, la protección ante el desempleo y las políticas sociales conquistadas en España.
El segundo principio pasa por el compromiso de “máxima austeridad” en el gasto corriente por parte del Gobierno y el máximo esfuerzo de inversión pública productiva para generar empleo y fortalecer el capital productivo. El tercer compromiso que expresó Zapatero fue agilizar las reformas y los planes del nuevo modelo económico, mejorando la competitividad y reformando los servicios, el sector energético y el de transportes.
El jefe del Ejecutivo se comprometió también, como cuarto principio, a integrar las posiciones de todos para defender nuevas reglas en el sistema financiero internacional, y la aplicación efectiva de las obligaciones internacionales contraídas en la lucha contra el cambio climático.
Por último, indicó que el quinto compromiso del Ejecutivo es impulsar y someterse a los acuerdos en el ámbito del diálogo social, lo que excluye, dijo, “cualquier decisión unilateral del Gobierno en el ámbito de las relaciones laborales”.
“Sobre el cumplimiento por parte del Gobierno de estos cinco compromisos, que hoy quiero renovar y solemnizar ante los representantes de los ciudadanos, rendiré cuentas periódicamente compareciendo en esta Cámara”, se comprometió. Además, reiteró que sobre la base de estos principios, buscará “incesantemente” la cooperación de todos los escenarios, empezando por el Parlamento.
Zapatero afirmó estar convencido de que el “rumbo sólido y ascendente” que España inició hace 30 años, su progreso económico y social, “no se va a torcer, no se va a debilitar”. “Estoy convencido de que vamos a superar este duro paréntesis como hemos sabido hacer en otros periodos de nuestra historia reciente”, reiteró.
Al lado de familias con problemas
Por último, aseguró que no regateará ningún esfuerzo ni desechará ninguna colaboración, y afirmó que su “preocupación prioritaria” seguirá centrada en el apoyo “a las familias y a los ciudadanos con más dificultades”.
“Esa sensibilidad es la que en este momento difícil se nos reclama a todos nosotros, y en primer lugar al Gobierno: ponernos permanentemente al servicio de los trabajadores que pierden el empleo, de las familias con más necesidades, es decir, de los que nada tienen que ver con el origen de la crisis y que, sin embargo, la sufren especialmente”, insistió.