''Me siento estafado, nos han prometido cosas que sabían que no iban a cumplir y han jugado con nuestro futuro“. Es el testimonio de un joven lagunero que adquirió una vivienda en 2010 mediante la Hipoteca Joven Canaria a 40 años. Hechizado por los cantos de sirena de la insistente campaña publicitaria lanzada por el Gobierno regional para fomentar la emancipación del sector de población de entre 18 y 35 años, firmó el contrato con una de las entidades financieras suscritas al convenio de colaboración con el Instituto Canario de Vivienda y solicitó la subvención de hasta 12.000 euros que concede el Ejecutivo para la compra de la primera vivienda.
Dos años después, tras haber presentado la documentación exigida y cumplir todos los requisitos, aún sigue esperando la respuesta de la Consejería de Cultura, Deportes, Políticas Sociales y Vivienda que rige Inés Rojas, a pesar de que las bases del decreto que regula estas actuaciones obligan a dictar resolución en el plazo de seis meses desde la fecha de la solicitud. Hace unos meses se quedó en el paro y actualmente afronta los pagos de su hipoteca con la prestación de desempleo y la ayuda económica de los familiares.
Otro joven tinerfeño relata una historia similar: “Llevo dos años presentando alegaciones, he ido miles de veces a presentar documentación y hace dos meses por fin conseguí que me aceptaran la ayuda, pero ahora me dicen que no pueden comprometerse a entregarme un documento que exponga que está concedida mientras no haya dinero”.
Fuentes oficiosas de la Consejería han asegurado a este periódico que no se ha otorgado ninguna subvención a la Hipoteca Joven desde mediados de 2009 por falta de fondos. ''Ni están ni se esperan'', apuntan las mismas fuentes. En 2008 ya se produjo un episodio similar. Entonces, más de 800 jóvenes se vieron afectados y dos tercios de las solicitudes presentadas fueron rechazadas.
Según los datos facilitados este miércoles por la Consejería de Vivienda, la Hipoteca Joven Canaria acumula desde su creación en 2001 un total de 29.959 propietarios, 2.106 entre enero y diciembre de 2011. Inés Rojas ha señalado que este instrumento permite a los jóvenes canarios ahorrar “entre 10.000 y 30.000 euros en la compra, dependiendo de la entidad bancaria”.
Los números de Rojas esconden, según los afectados, una doble trampa. La primera, ya mencionada, se refiere al impago de la subvención de hasta 12.000 euros para acometer los primeros gastos tras la compra del inmueble. La segunda, el suelo hipotecario del 2,75% que ponen como condición las entidades bancarias (el techo se sitúa en torno al 6%). Con el Euribor rondando el 1,52% en el último mes, actualmente los propietarios de viviendas firmadas bajo el manto de la Hipoteca Joven Canaria están afrontando los pagos a un tipo de interés que supera en más de un punto al indicador de referencia.
''Con otros bancos estaría pagando menos“, asevera uno de los afectados. ''Es una tomadura de pelo. Nos han vendido publicidad engañosa.”, concluye otro joven.