Municipios de Gran Canaria que hasta ahora enviaban sus basuras al vertedero de Juan Grande, al sur de la isla, podrían tener que llevarla al complejo de Salto del Negro, en la capital, por falta de capacidad para acogerla en el primero, según estimaciones del Cabildo insular.
El presidente de corporación, José Miguel Bravo de Laguna, ha reconocido este martes que, actualmente, “hay cierta incertidumbre” en relación al tratamiento de los residuos en la isla, pero considera que podrá resolverse un plazo de tiempo relativamente corto.
El presidente del Cabildo ha admitido que la gestión de los residuos está generado polémica, pero ha asegurado que la corporación está trabajando para atajar los problemas existentes y que ello obedece a una apuesta que ha hecho desde el comienzo del presente mandato en pro de una actualización de los procesos de tratamiento de las basuras que estaba pendiente desde hace tiempo.
“Desde que llegamos hemos mejorado sustancialmente las condiciones del tratamiento de residuos en esta isla, que, hasta que llegamos nosotros, eran, simplemente, dos vertederos donde se vertía basura indiscriminadamente, incluso vulnerando, yo creo, normativas medioambientales”, ha declarado al respecto.
Bravo de Laguna ha relatado que su gobierno insular ha apostado por modernizar esos vertederos para convertirlos en plantas de tratamiento de residuos y que, para ello, ha adjudicado dos concursos de adecuación de las instalaciones, uno en Salto del Negro y otro en Juan Grande, si bien con resultado desigual.
“Lo que pasa es que en Salto del Negro hemos podido entrar, y se está modernizando y ya hay tratamiento de las basuras de acuerdo con la normativa vigente, de acuerdo con el siglo XXI y, en cambio, en Juan Grande, por resolución judicial, no hemos podido entrar, porque está impugnado el concurso”, ha explicado.
Eso provoca, ha proseguido Bravo de Laguna, que en el caso de Juan Grande “el margen de maniobra sea mucho menor”, lo cual está “produciendo trastornos”.
Y ha explicado que la impugnación del concurso llevado a cabo en el vertedero del sur de la isla ha determinado que no se hayan podido realizar en él “obras que serían imprescindibles” para su funcionamiento adecuado, hasta el punto de que “es posible que algunos de los municipios que están vertiendo en Juan Grande tengan que desviarse a Salto del Negro”, según ha precisado.
No obstante, ha añadido: “Pero, al final, lo resolveremos”.
“Estas cosas son muy complicadas, el mensaje que quiero trasladar a la ciudadanía es de tranquilidad, de que estamos afrontando el problema, por primera vez en la historia de Gran Canaria, y que, de verdad, calculo que, en un mes o dos meses estará la situación mucho más normalizada que en estos momentos”, ha argumentado.
Bravo de Laguna ha hecho estas declaraciones a preguntas de periodistas antes de pronunciar una conferencia titulada Retos y desafíos de Gran Canaria en el siglo XXI y organizada por Tribuna Fórum.