Nueva Canarias y Coalición Canaria se dan 24 horas más para cerrar un pacto al que se opone Antonio Morales

Alexis González

Las Palmas de Gran Canaria —

El pacto casi cocinado entre Nueva Canarias y Coalición Canaria para presentarse en alianza a las elecciones generales del 10 de noviembre debe esperar 24 horas más y ya ha provocado el primer disgusto en el seno de NC. El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, se ha mostrado este jueves en la Ejecutiva Nacional de NC radicalmente en contra de la alianza con un partido del que ha recibido durísimos ataques en los últimos años.

Morales, que no estuvo en la Ejecutiva del lunes pasado en la que se anunció formalmente la apertura de negociaciones con CC y PSOE, ha defendido en solitario la vía de llegar a un acuerdo con el partido de Íñigo Errejón, Más País, como ya ha planteado públicamente esta semana. Y además, ha dejado entrever que no acatará la decisión de la mayoría de la Ejecutiva, favorable a continuar las negociaciones con CC. Su postura se traduciría en una clara demostración de estar en contra del acuerdo, no participando en la campaña electoral. No quiere verse ni en pintura en la misma foto de políticos de Coalición, o de sus socios grancanarios de Unidos.

La Ejecutiva Nacional, que se ha alargado más de lo previsto debido a esta controversia, decidió esta tarde ampliar 24 horas el plazo para cerrar un acuerdo con CC que cuenta con el respaldo de la cúpula dirigente y la mayoría del partido, pero que todavía se debe limar en lo relativo a los tiempos que deban repartirse NC y CC en el Congreso de los Diputados, si consiguen un escaño por la provincia de Las Palmas. Su presidente, Román Rodríguez, el vicepresidente Luis Campos, y otros dirigentes como Paco Santiago o Paco Zumaquero intervinieron en el cónclave nacionalista apoyando explorar esas negociaciones y “acatar lo que diga la mayoría”.

Como adelantó este diario el martes pasado, CC ha ofrecido a NC compartir ese acta por la provincia de Las Palmas si lo ganan, y ocupar una parte de la legislatura ese escaño Coalición Canaria, y la otra, Nueva Canarias. En un principio, la negociación partió de un ofrecimiento de CC de dos años cada uno, ante el hecho de que en las anteriores elecciones del 28 de abril, la candidata de CC, María Fernández, se quedó a solo 1.500 votos del candidato de NC, Pedro Quevedo. Ambos no obtuvieron representación y unidos, si consiguen al menos el 65% del total de votos de abril, obtendrían representación, previsiblemente en detrimento de la segunda diputada de Unidas Podemos.

NC no aceptó esta semana este reparto igualitario, entendiendo que ya no se dan las condiciones de abril, y ha planteado a CC ocupar el escaño los tres primeros años, y el último, en todo caso, para Coalición Canaria. De ninguna manera admiten que CC inicie la legislatura con sus dos cabeza de listas en el Congreso, ya que por Santa Cruz de Tenerife no se discute que CC repita con Ana Oramas y Guadalupe González Taño.

La previsión de que la legislatura que nazca de las elecciones de noviembre no llegue a agotarse, complica también esta fórmula, que CC prefiere que sean dos años y medio para NC, y un año y medio para la formación que ha gobernado las Islas los últimos 26 años hasta mayo pasado.

La fórmula definitiva queda ahora en manos de las comisiones negociadoras de ambos partidos. Del lado de NC, Román Rodríguez, Luis Campos, Carmen Hernández y Carmelo Ramírez llevan adelante los contactos con CC, con Isaac Godoy, Mario Cabrera y David de la Hoz como interlocutores junto al secretario general, José Miguel Barragán. Ambos partidos han refrendado este jueves sus listas electorales en sus ejecutivas, pendientes de cerrar el acuerdo.

El presidente de NC, Luis Campos, explicó en un receso de la Ejecutiva, en declaraciones a los medios de comunicación, que “hay un problema y es que todo está siendo muy inmediato y no estamos teniendo las bases para tener una discusión sobre el programa, propuestas, si vamos solos en una circunscripción o en dos”.

El dirigente también admitió que ha estado “en contacto con el PSOE”. Según ha podido saber este diario, la oferta socialista no es del agrado de NC, ya que no formarían una alianza electoral como en 2015 y 2016, que permitió al diputado Pedro Quevedo tener autonomía y hasta apoyar los Presupuestos vigentes, del gobierno de Mariano Rajoy, sino que debería integrarse en sus listas y solo a partir del tercer puesto. El PSOE obtuvo tres escaños por Las Palmas en abril y tiende al alza en las encuestas.

Luis Campos también dijo que “no descartamos Más País”, el partido de Íñigo Errejón, “pero nadie se ha puesto en contacto con nosotros”. Quién sí lo ha hecho, según ha podido saber este diario, ha sido el diputado de Compromís, Joan Baldoví, que a título personal sondeó hace dos días las intenciones de NC con respecto a Más País. Sus interlocutores fueron el propio Antonio Morales y el secretario de organización, Carmelo Ramírez. Este ha explicado en la Ejecutiva, que desde ese contacto, no ha habido más.

“Con Más País, reitero que nadie se ha puesto en contacto con nosotros a día de hoy”, aseguró Luis Campos a los medios de comunicación. “Si realmente hubiera un interés por la organización a lo mejor nos podríamos sentar ya que el mandato de la comisión negociadora era explorar los diferentes escenarios. Con Más País podríamos llegar a acuerdos, como con Compromís o la Chunta aragonesista, con los que concurrimos a las elecciones europeas, pero no voy a hablar de futuribles”, dijo.

Con respecto a la negociación más avanzada, con Coalición Canaria, el vicepresidente de NC indicó que “estamos en medio de una negociación y cuantos más aspectos se pongan sobre la mesa, más dificultades hay para solventarlos. NC y CC ya han compartido el espacio de defender las cuestiones de Canarias en Madrid, hay cuestiones de futuro fundamentales para el desarrollo de esta tierra como el REF y el Estatuto y estamos en eso de acuerdo en un 98%”.

“Es verdad que hay otras políticas que también se debaten en el Congreso sobre Sanidad Educación, Políticas Sociales y otros aspectos en los que podemos tener alguna diferencia”, admitió con respecto a las políticas más conservadoras de CC.

El vicepresidente de NC explicó que también está sobre la mesa si el partido, de no cerrar el acuerdo con CC, se presenta en las dos provincias canarias [en abril no lo hizo en Santa Cruz de Tenerife y facilitó que CC obtuviera dos diputadas] y en las siete circunscripciones insulares en el Senado, “o solamente lo hacemos allí donde hay opciones o vamos a una o a otra. Es un debate de parte y parte”.

“Hay una cuestión económica que es esencial para una organización modesta como la nuestra y más después de dos elecciones consecutivas”, reconoció sobre la necesidad de compartir esfuerzos con otros partidos.

Sobre las preferencias entre futuros socios, CC o PSOE, Campos apuntó que “si pensamos más desde la óptica progresista y de la izquierda hay un sentir más hacia un pacto con el PSOE, con el que gobernamos en Canarias. Pero estamos hablando de otra realidad. Nosotros no compartimos el modelo de país de CC, pero es verdad que tenemos muchas afinidades con la relación Canarias-Madrid, y es ahí donde sí hablamos de la otra vertiente más nacionalista. La tendencia es hacia un acuerdo más proclive con CC”.

El vicepresidente de NC entiende que “no es incompatible ir con CC y tenerlos en la oposición en el Gobierno, en el Cabildo y en el ayuntamiento, porque en muchos ayuntamientos estamos en fórmulas distintas”. Campos recordó que Nueva Canarias fue con Coalición Canaria en las elecciones de 2011 y CC mantenía entonces un pacto de gobierno en las Islas con PSOE, “y no supuso ningún problema”. Y en 2015 NC fue con el PSOE y los socialistas mantenían un pacto en Canarias con CC.

La cuestión fundamental en NC, aparte del no rotundo del grupo de Antonio Morales a pactar con CC, sigue siendo qué fórmula de tiempo compartido durante la legislatura se puede alcanzar. Y para NC, es “inasumible” que CC empiece la legislatura en ambas provincias. “Nosotros no somos partidarios del timesharing, porque en algún momento una de las dos sensibilidades nacionalistas no tendría espacio, que seríamos nosotros”, al no contar con peso en Santa Cruz de Tenerife.

“Pero es verdad que si nos implicamos, el diputado por Las Palmas puede salir. Pero si nos implicamos todos en la campaña [ya cuenta con el no por delante desde su propio partido, por parte de Antonio Morales y su organización de la Villa de Agüimes, Roque Aguayro] y para que se impliquen las dos organizaciones tienen que sentir que algo se gana”. Seguirán negociando...