“Pucherazo”. Con ese término, sin paliativos, ha definido las elecciones internas de Vox la candidatura alternativa a la de Santiago Abascal, oficialmente descartada por no haber alcanzado el número de avales que exigen los estatutos del partido de extrema derecha. A juicio del equipo de Carmelo González, fue la candidatura oficialista la que no alcanzó los más de 4.900 avales necesarios, “como ellos mismos han reconocido” este lunes ante los medios de comunicación, sin que hasta el momento se conozca cuántos alcanzó la suya. “Por cosas como estas, por saltarse las normas, por saltarse la ley, presentamos la denuncia contra el procés” independentista de Catalunya, protestan.
“Se trata de unas elecciones envueltas en la más profunda opacidad y desprecio de las normas de funcionamiento interno y de la Ley Orgánica de Partidos Políticos”, sostiene González. A su entender, el Comité Electoral Nacional “se ha saltado totalmente los plazos estipulados, no ha dado ninguna información y hay miembros de ese órgano que están en la candidatura de Abascal” en una situación que considera incompatible. Además, el proceso telemático de presentación de avales en la web del partido era engorroso y poco transparente, y sin acceso a los resultados obtenidos por cada una de las candidaturas concurrentes.
Ese cúmulo de irregularidades “demuestra que el Comité Ejecutivo Nacional cometió un error de cálculo porque planteó unas elecciones creyendo que no habría alternativa y establecieron los tiempos según su interés sin necesidad de acogerse a la normativa. Han demostrado que piensan que el partido es su cortijo con un total y absoluto desprecio por los afiliados”, sostiene un portavoz de la candidatura del médico canario.
En su relato de los hechos, plasmados luego en un comunicado, la misma fuente llega a hablar de “tácticas mafiosas” consistentes en que “mandos intermedios del partido, siguiendo instrucciones de arriba, han estado llamando estos días a algunas personas de la candidatura de Carmelo González para pedir que se retiraran de ella bajo la amenaza de ser destituidos de sus cargos orgánicos en la estructura de Vox”.
Ante estas y otras circunstancias, Carmelo González ha anunciado a este periódico que ya ha contratado los servicios de un equipo de abogados que inicialmente planteará un recurso ante los órganos competentes del partido para, acto seguido, acudir a los tribunales de justicia para el correspondiente recurso contencioso-administrativo. A su entender, se ha vulnerado la Ley Orgánica de Partidos Políticos.