- El partido cosechó en estos comicios 49.191 votos en las Islas, un 5.39% del total y se quedó fuera del Congreso. Por provincias, pierde 43.425 votos en Santa Cruz y 56.109 en Las Palmas
- Las expulsiones y la crisis generada provocaron dimisiones como la de su excoordinador Mariano Cejas o la de uno de los tres concejales en Las Palmas de Gran Canaria, Javier Amador
La crisis abierta en Ciudadanos Canarias le ha pasado factura al partido este 10 de noviembre. La formación ha perdido dos de cada tres votantes al pasar de cosechar 155.682 votos el pasado 28 de abril a 50.760 este domingo. Por provincias, ha perdido 43.425 en Santa Cruz y 56.109 en Las Palmas, con lo cual se ha quedado sin ningún representante en la Cámara Baja. Un hundimiento que se ha producido en todas las comunidades y que ha provocado este lunes a la dimisión de su líder, Albert Rivera, que ha dejado la política.
La ola naranja que pretendía consumarse en las elecciones locales de mayo bajo el cobijo de los buenos resultados que cosechó el partido en abril: 155.682 votos y un escaño por cada provincia (Melisa Rodríguez por Santa Cruz de Tenerife y Saúl Ramírez por Las Palmas), se quedó en un total de 53.492 votos y 32 representantes en municipios. En los cabildos obtuvo 54.572, con un total de 4 representantes. En el Parlamento de Canarias fueron dos los diputados que obtuvo con 65.854 votos. Estos dos parlamentarios fueron claves en negociaciones para un posible pacto con CC y PP para conformar un Gobierno en Canarias.
El partido modificó en los últimos meses tras la campaña de las locales su discurso en las Islas. De venderse como motor del cambio y asegurar que no pactaría con imputados pasó a no querer apoyar acuerdos con el PSOE para echar a CC de las instituciones. En consecuencia, Ciudadanos expulsó este verano a los dos concejales (Matilde Zambudio y Juan Ramón Lazcano) que facilitaron la investidura de la socialista Patricia Hernández en Santa Cruz de Tenerife y a los consejeros Enrique Arriaga y Concepción Rivero por permitir la de Pedro Martín en el Cabildo de esa isla.
Dimisiones en los últimos meses
A esos expedientes que acabaron en expulsión le sucedió una crisis por discrepancias y la dimisión del que fuera el coordinador del partido, Mariano Cejas. A su juicio, “hubo un engaño masivo” para “mantener a CC” en las instituciones. En este sentido, criticó que en los quince días de campaña en las autonómicas, la ahora diputada Vidina Espino “se hartara de decir que quería romper la burbuja, levantar las alfombras y abrir las ventanas” para regenerar políticamente a Canarias, pero luego expulsara a los miembros de Cs que pactaron para enviar a CC a la oposición en el Cabildo de Tenerife y el Ayuntamiento de Santa Cruz.
El caos en las Islas conllevó a que el Comité Ejecutivo de Ciudadanos nombrara una junta gestora para dirigir el partido en Canarias. Y, en medio de esa crisis, la diputada nacional Melisa Rodríguez no dio apenas señales de vida.
Finalmente, no fraguó el pacto con Coalición Canaria y el PP en el Gobierno regional. Los nacionalistas llegaron a ofrecer la presidencia a los populares, pero con unas condiciones que eran inasumibles. El PP, por su parte, sí fue protagonista del cambio en varias instituciones como el Cabildo de Lanzarote o La Palma donde hoy ya no gobiernan los nacionalistas.
Otra de las dimisiones llamativas es la del concejal en Las Palmas de Gran Canaria Javier Amador y sus duras palabras. El ex edil acusó a la fuerza de haberse acercado a la extrema derecha y a Coalición Canaria y de no permitir discrepancias internas. Así mismo, lamentó que Ciudadanos no haya contribuido a lograr un acuerdo de gobierno para España, ya que muchos creyeron que se trataba de “un partido que venía a ofrecer soluciones, que siempre iba a poner su programa sobre la mesa para exigir al bipartidismo las reformas que necesita el país”.
El exconcejal también hizo alusión a que Ciudadanos se presentó en Canarias con un mensaje de regeneración después de 26 años con los nacionalistas gobernando las instituciones. Sin embargo, lamentó que poco después de las elecciones la cabeza de lista del partido, Vidina Espino negociara con CC y tratara de alcanzar un acuerdo de gobierno conjunto.
Tras estos episodios, el partido ha hecho aguas. En la ciudad de Santa Cruz de Tenerife logró este domingo 5.577 apoyos frente a los 16.840 del pasado 28 de abril. La capital tinerfeña le dio en las locales 7.254 votos, y obtuvo los dos concejales que acabaron siendo expulsados. En toda la isla de Tenerife, este 10N consiguió 20.762 votos, frente a los 64.187 del 28A. Sin embargo, en mayo 24.072 personas refrendaron a Ciudadanos en el Cabildo tinerfeño en las locales, donde también fue fundamental para echar a CC.
En Las Palmas de Gran Canaria cosechó este domingo 22.388 votos menos que en abril. En total, 11.663 de los 34.051 que logró en las anteriores generales. Frente a ello, en esa ciudad hoy día el partido cuenta con tres concejales: Beatriz Correas, José Antonio Guerra y otras persona pendiente de asignar tras la marcha de Javier Amador.