SANTA CRUZ DE TENERIFE, 18 (EUROPA PRESS)
El Claustro de la Universidad de La Laguna ha celebrado hoy, viernes 18 de junio de 2010, una sesión extraordinaria en la que se votará --hasta las 22.30 horas-- la propuesta de nuevos estatutos de la institución académica.
Este texto ya fue abordado en la sesión anterior del órgano colegiado, celebrada el pasado 12 de abril, y aunque fue apoyado mayoritariamente, con 115 votos a favor y 58 en contra, no alcanzó la mayoría absoluta legalmente estipulada para tramitar su aprobación definitiva por el Gobierno de Canarias.
Durante la mañana los diferentes grupos claustrales de profesorado, alumnado y personal de administración y servicios intervinieron para dar su parecer acerca del documento objeto de votación. A las 12.00 horas se abrieron las urnas y permanecerán abiertas hasta las 22.30 horas, por lo que el resultado final se conocerá a última hora de la noche.
Los representantes de la comunidad universitaria habrán de votar por dos textos: el documento de estatutos consensuado por los diferentes grupos del claustro que participaron en la comisión extraordinaria configurada para crear el documento; y un segundo texto en el que se incorporan las enmiendas aprobadas en el debate de la pasada sesión del 12 de abril.
Al inicio de la sesión, el rector recordó la situación vivida en el anterior claustro, en la que un texto que partía con el consenso de todos los grupos fue no alcanzó los votos necesarios. Domenech señaló que volvía a traer el texto a la consideración del órgano por existir respaldo jurídico para ello, y por considerar que aún había margen para alcanzar el acuerdo necesario.
Tras la intervención del rector, les toco el turno a los portavoces de los diferentes grupos claustrales, por orden de menor a mayor representación; los de PAS en Acción, Estudiantes Demócratas (ED), Iniciativa Estudiantil Canaria (IEC), y Grupo de Ingenieros en Representación de Anchieta (GIRA) renunciaron a su turno de palabra.
PUNTOS DE VISTA
Alberto Marín, del grupo del personal de administración y servicios GRUPO, alabó que la comisión del claustro había logrado un texto consensuado en el que muchos artículos se aprobaron por unanimidad, y el resto por amplia mayoría. Por ello, se planteó cómo era posible que ese documento no alcanzara los votos necesarios. “Nos permitimos el lujo de exigir a los responsables de los grupos que manifestaron su consenso, que lo renueven”, expuso.
Luis Vega, del Liga de profesorado de la ULL, señaló que la institución tiene dos grandes retos por delante: la mejora de la competitividad investigadora y aumentar la calidad de la docencia. El estatuto no es la solución para ello, pero sí que ofrece herramientas para lograr esos objetivos.
Por ello, afirmó que, por encima de las críticas que puedan hacerse a la manera de tramitar el texto, debía apoyarse porque lo contrario sería “un fracaso del claustro”.
Cecilia Loaisa, de Eupas, criticó que el claustro ya había rechazado en la sesión de 12 de abril el texto que se votaba hoy, y en lugar de “acatar” esa decisión, se volvía a llevar a las urnas. Su grupo rechaza varios puntos del texto por entender que suponen un retroceso con respecto al estatuto anterior en lo que se refiere a la representatividad de su colectivo en los órganos de gobierno universitarios.
Por el Sindicato de Estudiantes de la ULL (SEULL) intervino Fabio Carreiro, quien reclamó igualmente una mayor representación de los estudiantes en los diferentes foros y órganos del centro docente. También criticó la celeridad con la que se había llevado de nuevo al claustro el texto de los estatutos, ya que, al coincidir con los exámenes de junio, a los representantes de estudiantes les había resultado imposible participar en el debate. Aún así, manifestó que era un documento necesario y lo apoyarían por “responsabilidad”.
Adán González, de la Asamblea del Movimiento Estudiantil Canario (AMEC) criticó que se aludiera tanto al consenso como justificación de estos nuevos estatutos. A su juicio, el consenso “es la muerte de la libertad y la creatividad”, por lo que valoró la existencia de la discrepancia. En su opinión, lo que había de fondo en el debate era una mera lucha por el poder del rectorado entre grupos de profesores, en lugar de un espacio para el debate estatutario real.
Carmen Rosa López, de Programa, criticó que en apenas dos meses se hubiera traído a votación el mismo texto estatutario. Por ello, al no haber cambios, repitió su intervención del 12 de abril, en la que criticaba los modos y plazos de tramitación del documento. Pese al consenso alcanzado en la comisión de redacción, su grupo considera que el texto resultante es vago, y dista mucho de poder considerarse definitivo.
Por su parte, Juan Ignacio Capafons, de Renovación Convergente, apoyó el texto y criticó que algunos grupos de la oposición utilizaran “falacias” para rechazarlo. Para él, no era cierto que se hubiera tramitado inadecuadamente, ni que se hubiera redactado muy rápido, ni que los antiguos estatutos fueran mejores. Y recordó que el documento, pese no haber logrado la mayoría absoluta en la sesión previa, si había tenido un amplio respaldo con 115 votos favorables.