El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo (Coalición Canaria), se ha reunido este jueves con Pedro Sánchez en la Moncloa dentro de la ronda de contactos autonómicos y, como era de esperar, el tema migratorio ha estado sobre la mesa. Clavijo, al término del encuentro, ha expresado su desconcierto por lo ocurrido el día anterior en la Cámara Baja. Y por primera vez ha criticado abiertamente la postura del PP, su socio de gobierno en las Islas, que no solo votó en contra de tomar en consideración la reforma de la Ley de Extranjería, sino que abandonó la negociación con el Gobierno central sobre este asunto y dedicó el pleno de este miércoles a hablar de ETA.
“No entendemos lo que ocurrió ayer en el Congreso. No entendemos la postura del PP”, señaló Clavijo antes de añadir: “Estamos muy decepcionados”, también con las declaraciones del portavoz del PSOE, Patxi López, en las que, según Clavijo, “de manera frívola” comparó migrantes con turistas.
Sobre la ruptura de la negociación, Clavijo ha señalado: “No solo no compartimos, sino que no entendemos ni desde luego justificamos de ninguna manera que te levantes de una mesa de negociación, sobre todo con un asunto tan importante como el que estamos hablando”, ha reprochado al PP. “Los problemas se resuelven estando en la mesa, los problemas se resuelven dialogando, hablando”, ha abundado.
Clavijo ha confirmado que ha trasmitido este malestar al PP nacional y que su voluntad es la de contactar de nuevo con el partido: “Tenemos que seguir negociando”.
Desde el pasado mes de julio, cuando el PP (junto a Vox y Junts) tumbó la toma en consideración de la reforma de la Ley de Extranjería, el partido de Clavijo, lejos de reprochar a su socio haber desbaratado una posible solución al colapso de los centros de acogida de menores en las Islas, dedicó sus ataques al Gobierno central, abrazando el argumento de los populares de que no había “voluntad política” en el Ejecutivo porque no se había negociado con los populares. Sin embargo, cuando la propuesta llegó al Congreso y se votó hacía meses que se negociaba el texto, unas conversaciones en las que había participado activamente el PP de Canarias, que además votó a favor del documento en el Parlamento regional (lo respaldaron todos los grupos menos Vox).
Durante el verano, además, hubo contactos entre el Gobierno central, el canario y el PP, pero Clavijo afirmó en varias ocasiones que no sabía nada del Ejecutivo desde hacía “meses”, lo que fue desmentido por el PSOE, que entonces hizo públicos al menos dos encuentros.
Cuando de nuevo volvieron a sentarse a negociar, el PP se levantó de la mesa y rompió el diálogo asegurando que España había rechazado la ayuda de la UE para trasladar a los migrantes a los estados miembros. Se basa esta afirmación en una carta de Ursula Von der Leyen en la que afirmaba que se podía “hacer más”, lo que fue interpretado por el PP como que España rechazaba una intervención mayor. Sin embargo, esto ha sido negado tajantemente desde el Gobierno y desde el PSOE. Concretamente, el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, que participaba en la mesa de negociación, retó al PP a decir cuántas plazas, dónde y cuándo se ofrecieron por parte de la UE a España. “La respuesta es cero”, dijo, y tachó de bulo y mentira esa afirmación del PP. También el eurodiputado canario del PSOE Juan Fernando López Aguilar aseguró que no era cierto que España hubiera rechazado la ayuda europea en la materia.
Feijóo revienta el pleno
Este miércoles los diputados acudieron al Congreso para abordar la situación migratoria, especialmente el colapso de los centros de acogida a menores no acompañados en Canarias, y para hablar de financiación autonómica. En su intervención, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recriminó a quienes utilizan la inmigración para esparcir bulos y mensajes de odio y recordó que España, con una mención concreta a Canarias, es también tierra de migrantes. Tras describir las duras condiciones en las que los isleños partían hacia Venezuela en los años 40 del siglo pasado, Sánchez anunció que pediría a la Unión Europea adelantar la entrada en vigor del Pacto de Migración y Asilo para que sus herramientas en materia de control de fronterizo y de reparto de personas migrantes empiecen a usarse en el verano del año 2025 y no en el de 2026, como está previsto. También presentó otras medidas, como que el próximo mes llevará al Consejo de Ministros al nuevo reglamento de extranjería y otras acciones en materia de inmigración, como la puesta en marcha de 6.000 plazas más de acogida, un Plan Nacional de Integración y Convivencia Intercultural y un nuevo programa de migración laboral.
En su respuesta, el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, habló de ETA y apenas dedicó tres minutos al asunto migratorio. De hecho, la presidenta de la Cámara, Francina Armengol, tuvo que recordarle el reglamento, según el cual debe ceñirse al tema del día, en este caso, inmigración.
Un trato diferenciado
En el encuentro en Moncloa, Clavijo ha reclamado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que la comunidad autónoma cuente con un tratamiento singular desde el Estado en cuanto al tratamiento de los menores migrantes.
Cuando los inmigrantes llegan a Canarias “llegan a Europa y llegan a España”, llegan a las islas “porque nos los trae Salvamento Marítimo” y por tanto hace falta “un acuerdo de país” y que el Estado asuma sus responsabilidades, afirmó.
El presidente canario ha informado de que Sánchez se ha comprometido a ingresar antes de fin de mes 50 millones de euros incluidos en el presupuesto para compensar los gastos autonómicos en la atención de los menores migrantes, aunque Canarias exige 160 millones.
Sánchez ha aceptado que es necesario que se pongan más recursos y ha emplazado a Clavijo a una próxima reunión con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, para tratar de esa financiación adicional que compense el gasto de Canarias en atender a unos 5.500 menores de edad extranjeros no acompañados.