La directora de gobierno de Urbanismo en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Carolina Darias, aseguró este jueves que el gobierno municipal de mayoría socialista no ha incumplido ningún compromiso electoral con los vecinos de Schamann al decidir presentar un recurso ante el Tribunal Supremo contra la sentencia judicial que anula el Plan Especial del Canódromo, al que éstos se oponen.
“No hemos incumplido con los vecinos porque el alcalde, Jerónimo Saavedra, sólo firmó un compromiso para buscar una solución compartida a la problemática del Canódromo”, explicó Darias, que no obstante admitió que pueda existir “decepción” en el colectivo vecinal Avecalta, promotor de la denuncia contra el Ayuntamiento por el Plan Especial y, por ahora, ganador del pleito.
Darias justifica el recurso, una opción que el alcalde había puesto en duda cuando se conoció la sentencia judicial, en el “imperativo legal”, ya que la Ley de Bases de Régimen Local obliga a “ejercer las acciones necesarias para la defensa de sus bienes y derechos”. De lo contrario, agregó la directora de gobierno, “tendríamos que responder los miembros de la corporación ante los tribunales”.
En todo caso, Carolina Darias anunció que, de momento, el Ayuntamiento sólo ha dado el paso de comunicar a la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal de Justicia de Canarias su intención de recurrir en casación ante el Supremo, pero agregó que “aún hay tiempo” para hacer efectivo ese recurso: el que emplee el órgano judicial en citar a las partes y redactar el texto, y un mes más de plazo para su interposición.
En ese tiempo, el gobierno municipal buscará acuerdos con Realia, la empresa constructora que ejecuta las torres en una de las esquinas del parque del Canódromo, con el fin de “buscar una solución que satisfaga a todas las partes, esto es, a los vecinos, al Ayuntamiento y a la empresa”.
En otro orden de cosas, la directora de gobierno no dejó escapar la oportunidad para arremeter contra el PP, ahora en la oposición, pero que promovió el Plan Especial durante su etapa de gobierno. Del resultado de aquellas decisiones, apuntó Darias, se producen ahora “consecuencias muy costosas para los vecinos”, no ya sólo el caso del Canódromo, sino también los de “otras operaciones urbanísticas mal realizadas”.