El senador Arcadio Díaz Tejera, uno de los tres candidatos a secretario general del PSC-PSOE, apeló este viernes a la “rebeldía” de los militantes socialistas para dar un nuevo rumbo al partido y evitar que “las instancias de poder metan la cuchara” en el resultado del congreso extraordinario del 20 y 21 de marzo.
“Hay un esfuerzo por parte de los sectores del poder para influir en los afiliados a la hora de decidir a quién hay que apoyar” para dirigir el partido, denunció Díaz Tejera en rueda de prensa.
Garantizó que él no retirará su candidatura e insistió en que “decidirán las urnas” y en que son los delegados “con su voto secreto” los que van a elegir al secretario general.
Anunció que no es partidario de que el secretario general saliente, Juan Fernando López Aguilar, esté en la nueva comisión ejecutiva, y señaló que si sale elegido quiere ser también candidato a presidente del Gobierno de Canarias en 2011.
Elogia la trayectoria de López Aguilar
Elogió la trayectoria del PSC-PSOE en la etapa de López Aguilar, porque “gracias a la aportación de todos” es el primer partido en las islas, pero explicó que si se abre una nueva etapa es conveniente que el secretario general saliente no esté en la ejecutiva para facilitar que la nueva dirección se consolide.
En el congreso socialista, explicó Díaz Tejera, se abrirá una nueva etapa de máxima integración, en la que se mantendrá “el rumbo básico” del partido, pero “modificando las formas y maneras”.
Entre los cambios que propone, enfatizó la necesidad de abrir el partido a la comunicación con todos los sectores económicos y sociales “sin excepción, vetos ni limitaciones”, para movilizar a la sociedad con “un mensaje coherente en defensa de lo público” ante el intento de PP y CC de desmantelar y privatizar los servicios públicos.
Díaz Tejera subrayó que cada uno de los delegados tendrá derecho a votar de forma secreta y decidir así el rumbo del partido, y alertó de que “el congreso nos lo quieren arrebatar” los poderosos, que ya han iniciado una campaña para denigrar a algunos y para decir a los delegados “a quién tienen que elegir”.
Pero esas instancias de poder “desconocen que el PSOE es un partido de izquierdas y de gente rebelde”, por lo que hizo un llamamiento a los militantes para evitar esas injerencias.
“Pasión y coraje cívico”, “dar la palabra y la decisión a los afiliados”, “nada de operaciones palaciegas”, “no hay que temer a la urna ni al voto”, fueron algunas de las expresiones empleadas por el senador en su rueda de prensa.
Díaz Tejera afirmó que él se presenta a la secretaría general “sin padrino y sin ser deudor de nada ni de nadie”, con cuarenta años de trayectoria pública como aval.
Su intención es movilizar a los 8.000 afiliados primero y a la sociedad después para que quienes “aman lo público” dirijan el Gobierno de Canarias en un momento económico difícil, frente a quienes persiguen privatizar los bienes públicos.
“Cuando más se necesita lo público y lo político es cuando más desafección hay en la población, y lo público y lo político lo necesitan sobre todo las personas que no tienen poder”.
De ahí que sea imprescindible que tanto la militancia socialista como la sociedad se sientan partícipes del cambio, dijo Arcadio Díaz Tejera.
Defendió que el partido se comunique permanentemente con todos los sectores económicos y organizaciones sociales, no sólo con las cúpulas de empresarios y sindicatos, como forma de integrar a la sociedad en la defensa de la sanidad, la educación y los servicios sociales.
Respecto a las relaciones con otros partidos, en particular con Coalición Canaria, Arcadio Díaz Tejera afirmó que “en los ámbitos institucionales todos tienen que relacionarse con naturalidad”, pero hizo hincapié en que el trabajo de los socialistas debe ser con la sociedad canaria y no distraerse “ni bailar al ritmo de otros cuando ellos quieren”, porque “la política no es un ejercicio de las élites”.