El presidente de la Confederación Canaria de Empresarios (CCE) de Las Palmas, Agustín Manrique de Lara, ha manifestado que la renuncia de José Manuel Soria como ministro de Industria, Energía y Turismo es una “pena” porque Canarias deja de tener un “alto interlocutor” en el Gobierno.
Manrique de Lara ha reconocido que esperaba que presentara su renuncia, a las vista de los acontecimientos: “Creo que no tenía otra opción que la que ha adoptado y, por lo tanto, era algo que en las últimas horas se esperaba”.
Según Manrique de Lara, la decisión de Soria, que también ha renunciado a su cargo como presidente del PP en el Archipiélago, “afecta a todos en Canarias”, pues es una persona que lleva veinte años colaborando con las instituciones y “un actor importantísimo de la realidad canaria y de su isla, que no puede dejar indiferente a nadie”.
Manrique de Lara, que también es militante del PP, ha dicho que, en estos momentos, es lógico pensar en los veinte años que Soria ha dedicado a los servicios públicos, a su partido y a la política, en los que ha ocupado cargos “muy relevantes y de responsabilidad, desde alcalde de su ciudad hasta ministro de España, una altísimo honor para cualquier persona”.
En este último cargo, como ministro, ha facilitado las buenas relaciones entre el Gobierno de España y de Canarias, “con importante logros en los últimos meses”, según ha señalado el presidente de la patronal de la provincia de Las Palmas.
Soria ha justificado y tomado una decisión de renuncia y habrá que analizar en el futuro el motivo que le llevó a adoptar esta decisión, ha dicho.
Ahora sólo se puede reflexionar sobre su defensa de la actividad económica de Canarias y de su Régimen Económico y Fiscal para lograr unas condiciones favorables al desarrollo de la economía de las isla, ha considerado.
Manrique de Lara cree que ahora también se abre una etapa de reflexión para todos y está convencido de que se podrá analizar su renuncia con la información que Soria se ocupará de facilitar.
La decisión que ha tomado este viernes ha sido “rápida y en defensa de los intereses del partido que representa y del Gobierno de España y se debe respetar”, ha concluido Manrique de Lara.