Las cifras hablan por sí solas. El tráfico de pasajeros en el Puerto de Las Nieves, en el municipio grancanario de Agaete, lleva tres meses consecutivos en caída con respecto al mismo período del año pasado. 22.698 pasajeros menos que en 2017 han embarcado en los tres meses de verano por la villa del norte de Gran Canaria, unos datos que el Gobierno de Canarias lleva ocultando semanas, probablemente porque se le desmorona los motivos para ampliación de un muelle que pierde viajeros a medida que va pasando el tiempo.
Más de tres semanas han pasado desde que este periódico intentara conseguir sin éxito las cifras de pasajeros en el Puerto de Agaete a través de la Consejería de Obras Públicas y Transportes del Gobierno de Canarias. En la primera ocasión desde el gabinete de prensa de Pablo Rodríguez, titular del área, se desvió la llamada a Puertos Canarios, donde dieron largas durante unos días anunciando que se emitiría una nota de prensa, hasta que la versión cambió por esta otra: “Nosotros no podemos dar esos datos, fueron pasados a la consejería y ellos son los que los difunden”.
En un nuevo intento de obtener los datos en la consejería, desde allí contestaron que no los tenían y que cuando dispusieran de ellos enviarían un comunicado a todos los medios. En dos ocasiones se volvió a preguntar por las cifras de pasajeros y no hubo respuesta hasta que, el pasado 8 de noviembre, se difundió la anunciada nota de prensa. Durante este fin de semana, finalmente, se colgaron los datos en la web de Puertos Canarios. Con las estadísticas en la mano, se puede observar que el tráfico ha descendido un 7% en sólo tres meses.
La obra de ampliación del muelle de Agaete se ha convertido en uno de los grandes temas de interés durante este año en las islas, particularmente en Gran Canaria. El rechazo social que ha generado la construcción de un macromuelle en esa villa, confrontado con la firme postura del Ejecutivo regional de seguir a por todas desoyendo a la ciudadanía, ha ocupado en numerosas ocasiones las portadas de los medios de comunicación canarios. Ahora, con la caída de cifras durante este verano y con la puesta en marcha en el muelle de la capital grancanaria del nuevo fast ferry Volcán de Teno, que une las dos capitales en una hora y media, el debate se intensifica aún más.
Durante este sábado más de 10.000 personas salieron a la calle para decir no a la ampliación del Puerto de Las Nieves. Con lemas como “Agaete no se vende’”, ‘“No perdamos el norte” o “Salvar Agaete”, los vecinos del municipio, arropados por miles de personas de otros lugares de las islas, recorrieron las calles de la capital grancanaria para solicitar al Gobierno de Canarias que se escuche a la ciudadanía y se paralice la obra.
Ante esta manifestación la respuesta del Gobierno vuelve a ser la de dar la espalda a la ciudadanía. El viceconsejero de Infraestructuras y Transportes del Ejecutivo regional, Onán Cruz, afirmó este lunes en la Cadena Ser que seguirá adelante con la ampliación. “Respetamos la manifestación de Salvar Agaete, pero la ampliación es necesaria”, dijo Cruz. A su entender, o al menos eso manifestó, es “una oportunidad para Agaete” porque las dos navieras (Fred Olsen y Armas) “no pueden coincidir en el muelle”, como se plantea desde diferentes colectivos.
La ampliación del muelle de Agaete surgió hace más de una década. Ya desde entonces brotó el debate entre administraciones públicas, empresarios y ciudadanos sobre la necesidad real de la obra. En noviembre de 2017, el vicepresidente del Gobierno de Canarias y consejero de Obras Públicas y Transportes, Pablo Rodríguez, aseguró que las adjudicaría en el primer trimestre de 2018. Y aunque se retrasara seis meses, finalmente la adjudicación llegó en el mes de junio.
Desde ese momento el rechazo ciudadano contra el macromuelle ha ido aumentando exponencialmente. El colectivo Agaete Sin Macromuelle no está solo, diferentes administraciones de la isla se han unido después de que el Gobierno central y el canario negaran a los vecinos decidir sobre la obra. Sin embargo, y a pesar del descenso de las cifras, el Gobierno presidido por Fernando Clavijo no quiere hacer frente a una realidad que desmonta sus argumentos.
Una de las razones que el Ejecutivo ha divulgado para llevar a cabo esta obra es el aumento de pasajeros, sobre todo a raíz del descuento del 75% en los billetes de pasajeros entre islas, a finales de junio de 2017. Cierto es que después de que se activara esta bonificación para los residentes canarios los viajes entre islas aumentaron vertiginosamente sobre todo en los meses de julio, agosto y septiembre del año pasado, pero la realidad ha dado un giro, seguramente inesperado, para los que siempre han defendido el muelle.
El pasado mes de diciembre la compañía Naviera Armas puso en marcha un barco rápido que conecta Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife en una hora y media, saliendo desde las dos capitales. Con una diferencia de tiempo muy corta con respecto al barco de Fred Olsen que sale desde Agaete, la naviera española ha logrado fidelizar a muchos pasajeros que se desplazaban desde muchos puntos de la isla al norte de Gran Canaria para ir a la isla vecina.
Según los datos de Puertos Canarios, en julio de este año el muelle de Agaete perdió 9.679 pasajeros con respecto al mismo mes del año pasado; en agosto la caída fue de 6.340 y en septiembre de 6.679. Aún no se han publicado las cifras del mes de octubre. A pesar de estos datos, desde la Consejería de Obras Públicas y Transportes presumen de que el Puerto de Las Nieves es el segundo con mayor crecimiento de pasajeros en los primeros nueve meses del año, pero en la nota de prensa se omite que en el trimestre veraniego las cifras han caído de forma vertiginosa.
Además, según datos oficiosos ofrecidos por Naviera Armas, con el descuento del 75% el número de viajeros en Agaete subió un 20%, pero a raíz de que ellos pusieran en marcha el nuevo barco rápido desde el Puerto de La Luz, la compañía noruega, que opera en el norte de Gran Canaria, perdió ese 20% y un 12% más.
Para mantener su idea otra de las razones que manifiesta el Gobierno regional es que hay que favorecer la libre competencia y que en Agaete hay un monopolio por parte de Fred Olsen. Sí existe una sentencia dictada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) del 15 de marzo de 2018 en la que se le recuerda a Puertos Canarios que una sola naviera no puede seguir operando en régimen de monopolio desde el Puerto de Las Nieves. En ese fallo se ponen dos opciones encima de la mesa: la adjudicación de dos lotes de franjas horarias para dos navieras o hacer una ampliación del muelle. El Ejecutivo, sin unos motivos que justifiquen su decisión, se ha inclinado por ampliar el muelle.
El candidato del PSOE al Cabildo de Gran Canaria, Luis Ibarra, subraya que la ampliación del Puerto de Agaete tenía sentido hace 15 años, cuando se planteó, pero en los últimos años se ha visto como el proyecto en el Puerto de La Luz “se ha consolidado” con el muelle de La Esfinge. El expresidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas asegura que desde que se han hecho estas inversiones y con el nuevo fast ferry que zarpa de la capital grancanaria, “lo que siempre se manifestó era que iba a restar tráfico al muelle de Agaete, como así ha sido”.
“En los meses de verano de este año ya hay decremento en el tráfico de Agaete, entonces tenemos un muelle que está al 30% de su capacidad y que cada vez va a tener menos tráfico, por lo tanto, no es necesario”, indica. Ibarra sugiere que el Gobierno de Canarias debería gastarse ese dinero en el Puerto de La Luz trasladándoselo primero al Ministerio de Fomento. “Eso se llama gestionar y poner los recursos donde es más necesario”, sentencia.
La plataforma Agaete Sin Macromuelle y el ayuntamiento del municipio del norte de Gran Canaria siguen firmes en su postura: van a seguir en la lucha por hacerle entender al Gobierno de Canarias que la ampliación “no es necesaria”, según afirma el alcalde de la villa, Juan Ramón Trujillo (PSOE). Trujillo considera un “error gravísimo” que el Ejecutivo se negara a consultar a los vecinos sobre la ampliación del muelle y por ello argumenta que “si no hay consulta no estamos a favor de que se desarrolle el proyecto”. La idea de Trujillo es hacerle llegar al Gobierno que no es necesaria la ampliación del muelle ya que “los datos de actividad portuaria no lo justifican”.