En las elecciones autonómicas canarias de 2011, el PP fue el partido más votado con el 32% de los votos válidos, seguido de CC con el 25%, pese a lo cual ambos partidos quedaron empatados a escaños, una igualdad que no hubiera resuelto el nuevo modelo electoral que se debate en el Parlamento de Canarias.
Según una simulación realizada por la Agencia Efe aplicando el nuevo sistema a aquellos resultados, el Parlamento de Canarias habría quedado conformado por las mismas cuatro fuerzas políticas que entonces (PP, CC, PSOE y NC) ya que ninguna otra hubiera superado las nuevas barreras de acceso, pese a que se rebajarían.
Según el acuerdo provisional entre los partidos que promueven esta reforma (PSOE, PP, Podemos y NC), las barreras electorales quedarían en el 15% de los votos válidos en una isla o el 3% de los votos regionales, frente al 30% y 6% actuales.
El nuevo sistema electoral amplía el Parlamento de 60 a 70 diputados, y de los nuevos escaños uno se asigna a la circunscripción de Fuerteventura y nueve se reparten en el denominado colegio de restos.
En las elecciones autonómicas de 2011, el PP obtuvo el 32% de los votos y 21 escaños, CC el 25% de los votos y 21 escaños, el PSOE el 21% de los votos y 15 escaños y NC el 9% de los votos y 3 escaños.
En esta simulación aplicando el modelo que se está debatiendo en el Parlamento, la correlación de fuerzas y las combinaciones no sería muy diferentes, aunque los cuatro partidos aumentarían en el número de diputados.
De los nueve escaños del colegio de restos, tres irían para el PSOE, dos para el PP, dos para CC y dos para NC.
Por islas, cinco de los diputados del colegio de restos se asignarían a Tenerife (dos del PSOE y uno de cada uno de los otros partidos) y cuatro a Gran Canaria (uno de cada partido).
El octavo diputado que se incorpora a la circunscripción de Fuerteventura hubiera recaído en Nueva Canarias.
En cuanto al peso relativo de cada partido en la composición del Parlamento, Nueva Canarias conseguiría los avances más significativos, ya que, redondeando, pasaría de contar con el 5% de los escaños con el sistema vigente (3 de 60) al 9% si se aplicara el nuevo modelo (6 de 70).
El PSOE también mejoraría su posición relativa en la cámara pero modestamente, al pasar del 25% de los escaños al 26%, mientras que el PP bajaría del 35% del total al 33%, lo mismo que CC.