LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 9 (EUROPA PRESS)
Nueva Canarias (NC) ha considerado que el Gobierno autonómico de ATI-CC y PP, después de los “vaivenes” suscitados por la estrategia política del vicepresidente y consejero de Economía, José Manuel Soria, respecto a la reducción de las consejerías, “sí debe plantearse una reorganización político-administrativa”, aunque no se disminuya el número de departamentos del Ejecutivo.
En un comunicado, la formación nacionalista explicó que el verdadero problema de la administración canaria está en que el modelo ha quedado obsoleto después de 28 años de autonomía y por tanto éste debe adaptarse no sólo por las circunstancias que obliga la coyuntura económica sino, sobre todo, “porque se trata de un modelo que no satisface las necesidades de los administrados”.
En este sentido, el partido que lidera Román Rodríguez apuntó que existe invasión y duplicación de las competencias entre las cuatro administraciones (Estado, Gobierno de Canarias, cabildos y ayuntamientos), lo que supone un mayor gasto económico y sobre todo un exceso burocrático que ralentiza las gestiones en perjuicio de los ciudadanos.
“Es necesario establecer un nuevo modelo política-administrativo y competencial entre los órganos de la Comunidad, que permita una mayor descentralización hacia los gobiernos insulares, evitando el actual solapamiento de competencias, la doble burocracia y la ineficacia, con el consiguiente perjuicio que esto supone para los administrados”, señaló NC.
Así, denunció que el Gobierno de Canarias de ATI-CC y PP “no es capaz de acometer esta tarea porque se ha caracterizado precisamente por hacer lo contrario. No en vano los presidentes de los cabildos, de todos los colores políticos, han afirmado que éste es el Ejecutivo más centralista en la historia de la autonomía del archipiélago”.
NC apostó asimismo por una remodelación de la Hacienda canaria que permita que los recursos del REF estén en manos de los cabildos. Esto permitiría una mayor transparencia en la recaudación de cada isla y un reparto equilibrado en función de las necesidades territoriales, evitando el oscurantismo y la distribución sesgada de estos recursos desde el Gobierno canario.
Finalmente, recordó que originalmente eran las instituciones insulares las que tenían la facultad recaudatoria de los recursos del REF y que, en pro de la creación de la comunidad autónoma, cedieron al Gobierno de Canarias esta potestad, lo que en una etapa de crisis económica como la actual ha dejado a los cabildos ante una situación muy complicada, especialmente por el ahogo financiero al que les somete el actual Ejecutivo autonómico.