El presidente de Nueva Canarias-Bloque Canarista, Román Rodríguez, exige al Gobierno de Canarias que desarrolle el Plan de Vivienda para favorecer el acceso a un hogar a las decenas de miles de familias canarias que lo precisan.
Para ellos, el líder de la formación considera que se debe combatir la especulación, controlar el alquiler vacacional limitando la compra a extranjeros, y desarrollar un programa de alquiler seguro que facilite la salida al mercado “de una parte de las 210.000 viviendas vacías de las Islas”
Para Rodríguez, el acceso a una vivienda “es hoy uno de los principales problemas sociales de Canarias” y critica que “un año después de su llegada al Gobierno, CC y PP siguen sin ofrecer respuestas efectivas a uno de los mayores problemas sociales de Canarias, al tiempo que estimulan políticas desarrollistas que impulsan el crecimiento poblacional y dificultan aún más el ya complicado acceso una vivienda.
En medio de una auténtica emergencia habitacional, con más de 25.000 demandantes de viviendas públicas inscritos, Nueva Canarias entiende que “se debería apostar nítidamente por construir vivienda social de promoción pública para el sector de población más vulnerable. Pero siendo conscientes de que, junto a él, tienen problemas de acceso a la vivienda mujeres y hombres trabajadores con ingresos bajos y medios, así como jóvenes con la intención, tantas veces frustrada, de emanciparse”.
A ello “se suma la no menos incoherente propuesta del PP de poder utilizar las dotaciones existentes en la Reserva para Inversiones en Canarias (RIC) a comprar viviendas privadas”, planteada por el vicepresidente del Gobierno y consejero de Economía.
Por otra parte, en opinión del presidente de Nueva Canarias, resulta “impresentable” la adquisición de viviendas de lujo por parte de extranjeros a los que por ello se les concede la nacionalidad, una normativa (la conocida como Golden visa) estatal que debe modificarse, como ya anuncio en abril el presidente Sánchez. Y entiende, asimismo, que desde Canarias hay que buscar fórmulas que posibiliten “limitar la compra de casas por parte de extranjeros no arraigados en el Archipiélago, por abrir puertas a una mayor especulación con la vivienda”.
Considera que hay que desarrollar de forma integral el vigente Plan de Vivienda, incrementando el parque de casas protegidas, llevar a cabo un adecuado control del alquiler vacacional (que debió pasar por una moratoria mientras se elabora y aprueba la ley) y medidas destinadas a sacar al mercado una parte de las 210.000 viviendas vacías del Archipiélago.
Respecto a esto último, según datos del INE, entre las ciudades de más de 200.000 habitantes, Santa Cruz de Tenerife aparece a la cabeza de viviendas vacías del Estado, con un 17,3%, y en cuarto lugar se sitúa Las Palmas de Gran Canaria (14,3%).
Para ello, explican que el grupo parlamentario de Nueva Canarias-Bloque Canarista presentó en el Parlamento una proposición no de ley (PNL) para la creación del Programa Canario de Alquiler Seguro para el fomento del arrendamiento de vivienda vacía en las Islas. Con un paquete de medidas que incentivan su puesta en alquiler como respuesta rápida y eficaz a la actual y grave situación. Señalan que lo esencial del Programa de Alquiler seguro es que es el Gobierno quien arrienda y ofrece garantías la devolución del patrimonio en condiciones adecuadas a los propietarios.
La propuesta parlamentaria de NC-bc no prosperó por el voto en contra de los grupos que apoyan al Gobierno.