La propuesta de crear en La Palma una moneda local, el Drago, planteada por el informático Carlos Pérez, ha sido vista con “escepticismo” por el presidente de la Confederación Empresarial de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) de la Isla, Tomás Barreto. El dirigente de la patronal palmera considera “bastante complejo” poner en marcha un sistema dinerario insular con divisa propia al margen del euro.
Ha comentado que, no obstante, “la idea es curiosa” y habrá que “escuchar a su impulsor” para conocer en profundidad el proyecto. Por tal motivo, pese a las dudas que despierta, opina que siempre es positivo que se abra un debate para, entre todos, buscar soluciones a la actual paralización económica.
También ha insistido en que, “la idea, como concepto, es interesantísima”. El dinero, ha subrayado, “quieto y parado, no genera riqueza” y está convencido de que, cuando “se eleve la confianza, saldrá a la calle otra vez”.
La iniciativa, pionera en Canarias, busca dar fluidez al dinero con la creación de una moneda insular, denominada Drago, a fin de dinamizar el comercio y el desarrollo integral de la Isla. Su promotor, Carlos Pérez, un joven informático vinculado al mundo empresarial por tradición familiar, explica que “se trata de trasladar a La Palma una experiencia exitosa de la región de Chiemgau (Alemania) y la ciudad de Bristol (Inglaterra)”. En los citados lugares han implantado una divisa comarcal para reactivar la economía en ambas zonas.