La piscina del casco urbano de Mogán, después de que su construcción se iniciase en el año 2002 y su recepción tuviese lugar en el 2010, sigue sin ver su puesta en marcha. Una inversión que supera los más de 3.5 millones de euros y que no ha tenido continuidad en la obra en los sucesivos años, con periodos de paralización y reinicios constantes.
En diciembre de 2010 hubo un intento de inauguración, pero días antes de su inauguración se produjo la rotura del vaso principal de la piscina y otros desperfectos que tuvieron como resultado varias reparaciones, tales como filtraciones del vaso de la piscina de hidroterapia, la zona termal, el aljibe y los vasos de compensación. Todo ello ha supuesto una reparación extra a la inversión inicial que supera los 200.000 euros.
“Pasados casi dos años, los vecinos y vecinas seguimos esperando una respuesta por parte de los responsables políticos sobre lo sucedido técnicamente con dicha infraestructura y que a medida que pasa el tiempo el único caudal que los vecinos y vecinas ven son los euros que se tira en ella”, expresan desde Nueva Canarias y CIUCA.
“Este es otro claro ejemplo de la falta de responsabilidad, la pasividad y la incoherencia política con nuestros vecinos. Obras proyectadas y adjudicadas antes de la primera legislatura del Partido Popular en Mogán y que la han vendido como nuevas en las siguientes convocatorias electorales”, añaden.