El PP solo podrá gobernar en Castilla y León si se alía con Vox

Barómetro de Ágora Integral

Estimación de escaños en Castilla y León

El Partido Popular anunció las elecciones anticipadas en Castilla y León creyendo que iba a librarse de Ciudadanos y al final podría encontrarse con un socio más incómodo después del 13 de febrero, cuando se celebren los comicios. Los populares se han desinflado en las últimas semanas y ya no llegan ni por asomo a la mayoría absoluta ansiada por Mañueco (PP), el actual presidente de la región.

Vox podría decidir el futuro de la formación liderada por Pablo Casado. Y podría abrir la puerta de hasta ahora una realidad inédita en la política española: que el grupo de extrema derecha de Santiago Abascal entre en un gobierno autonómico (más allá de la ex consejera de Vox que ahora es consejera de Educación en el ejecutivo de Murcia). Andalucía, donde se celebrarán próximas elecciones, mira de reojo.

El último barómetro de Ágora Integral, en exclusiva para Canarias Ahora, da al PP como ganador de los comicios. Pero lo que iba a ser un camino de rosas, finalmente se quedaría en un 32,7% de los votos, lo que otorgaría a los populares entre 31 y 32 procuradores. La mayoría absoluta está en 41. La llave la tiene Vox, que pegaría un subidón tremendo al pasar de un escaño a entre 10 y 11, un 15,2% del total de las papeletas.

Quedaría por ver si Vox decide entrar en el gobierno o continuar con su estrategia de aguantar agazapado mientras la crítica popular contra la administración pública le esquiva. Ya sea en Catilla y León o Andalucía, donde podría entrar un peso fuerte de la formación de extremo derecha, Macarena Olona, el PP gobernará con casi total seguridad con Vox.

Y sería un cambio de rumbo, un giro de 180º grados a lo que está ocurriendo en el resto de países comunitarios, que buscan estabilidad en tiempos de incertidumbre. El último ejemplo: la reelección del socialista Antonio Costa como primer ministro en Portugal. O el nombramiento de Olaf Scholz como nuevo canciller de Alemania, el candidato más parecido a su antecesora, Merkel. O la continuidad de Sergio Mattarella como presidente de la República de Italia cuando parecía que estaba a punto de marcharse.

La izquierda, por otro lado, lo tiene muy complicado en Castilla y León. La suma PSOE-Unidas Podemos se quedaría en poco más de 30 escaños, un 35% de los votos. Y no tiene pinta que la suma con el resto de grupos políticos, como son Soria ¡Ya! (dos escaños), Vía Burgalesa (1), Unión del Pueblo Leonés (2/3), Zamora Decide (0/1), EV (0/1) sea suficiente. Por Ávila (XAV), que es una escisión del PP, conseguiría hacerse con el mismo escaño de 2019.

En líneas generales, el PSOE experimenta en Castilla y León una tendencia a la baja, perdiendo siete puntos porcentuales del voto que logró en 2019. El PP sube, pero el ascenso se ha menguado en las últimas semanas después de que la campaña se emponzoñara por la polémica de las macrogranjas. Vox pasará, según los datos, de un 5,49% del total de las papeleteas a un 15,2%. Unidas Podemos se mantendría, sumando dos procuradores más para hacerse con tres. Y Ciudadanos, en línea con lo que está ocurriendo en el resto de España, estaría a punto de desaparecer, pasando de 13 escaños a solo uno.