“Las aguas del Sáhara no son de Marruecos, son aguas del Sáhara”. Así de contundente respondió el presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, al periodista y director de eldiario.es, Ignacio Escolar, sobre la posibilidad de que Marruecos aprovechara el territorio del norte de África para entrar en zonas que actualmente son de Canarias. Lo hizo en la primera entrevista que inicia el ciclo Diálogos en Presidencia del Gobierno en Santa Cruz de Tenerife, en un acto que organiza eldiario.es y Canarias Ahora.
El socialista asegura que Marruecos no tiene una cobertura internacional que le permita acceder a esa plataforma continental, “la propuesta que ha hecho decae por sí misma”. Esta respuesta se produce solo un día después de que el Parlamento marroquí aprobara las dos leyes que amplían las fronteras de su país y que se solapan con las aguas del Archipiélago canario.
Torres -quien asegura que se siente respaldado por el Gobierno central a la hora de defender las aguas canarias- insiste en que desconoce cuál es el objetivo de Rabat. “Tú negocias cuando tienes una posibilidad de que lo tuyo prospere, esto no lo tiene”.
El presidente canario confía en que la diplomacia sea la solución del problema. “Hay que tener buena relación por cuestiones diversas, a la vez que hay ser firmes en la defensa de nuestros derechos e intereses”.
“No vamos a darle la espalda al drama de la migración”
El socialista no cree que exista una relación directa entre el debate de las aguas y el repunte de personas llegadas en patera a Canarias. “No es desde Marruecos desde dónde más se está incrementando la salida de migrantes”, asegura, y añade que hay otros países de “relaciones más dificultosas” al sur de África.
Entiende que se pueden plantear soluciones para evitar que estas personas tengan que arriesgar su vida -y en muchos casos perderla- para embarcarse en el mar huyendo del hambre o la violencia. Se debe implementar que haya inversiones económicas en esos países, que haya una colaboración para que se puedan producir negocios y generación de empleo, mecanismos de seguridad que son precisos y en que las relaciones sean normales desde lo diplomático.
Según datos del Ministerio, cuenta Torres, la migración se ha podido frenar un 40% hacia Canarias. No obstante, recuerda que si en un año se ha reducido a la mitad la migración hacia a Europa las cifras se han doblado en Canarias. “Las mafias buscan otras salidas”, insiste, aunque destaca que los números se alejan mucho de los del año 2006 cuando llegaron 33.000 personas en pateras o cayucos a las Islas.
Aprovechó la ocasión para adelantar que la próxima semana mantendrá un encuentro con cabildos, municipios, ministerios y asociaciones para mejorar la coordinación. El objetivo es “dar la justa respuesta a estas personas, lo que no podemos hacer es cerrar nuestros puertos”.
Sobre la petición que realizó el expresidente del Gobierno de Canarias Fernando Clavijo a los ministros para explicar este repunte de personas a las Islas, el socialista aseguró que no va a usar la migración como un arma arrojadiza. “Ni lo hice cuando estaba en un lado, ni en el otro”, comentó, refiriéndose a al año 2006 cuando gobernaba el Partido Popular en las Islas y cedió las instalaciones de su municipio para acoger a menores no acompañados.