El Grupo Parlamentario Socialista Canario ha dado un paso más encaminado a la ruptura del pacto con Coalición Canaria (CC) que sustenta al Gobierno regional que preside el nacionalista Fernando Clavijo. Y lo ha hecho durante el informe de la ponencia parlamentaria que negocia cambios en los Presupuestos de 2017 al romper la unidad de voto con los nacionalistas y apoyar enmiendas del PP y NC que redistribuyen más de 90 millones de los 160 que constituyen el Fondo de Desarrollo Regional (Fdcan).
Por tanto, con esta decisión, el 56 por ciento del Fdcan se destina a proyectos sanitarios, educativos y de servicios sociales en contra del criterio “unilateral” que adoptó el Consejo de Gobierno el pasado 28 de noviembre en ausencia de los consejeros del PSOE, que abandonaron la reunión por estar en contra del criterio adoptado por el presidente Clavijo.
Un criterio que CC se negó a renegociar cuando el 5 de diciembre se reunió la Mesa de Seguimiento del Pacto en Las Palmas de Gran Canaria, motivo por el que la dirección de la gestora del PSOE canario transmitió en la tarde del jueves, 11 de diciembre, al Grupo Parlamentario que apoyara las enmiendas presentadas por la oposición referidas al Fdcan.
Una decisión que el PSOE transmitió a sus socios nacionalistas apenas una hora antes de que se iniciara este viernes la reunión de la ponencia de la Comisión de Presupuestos que emite el informe sobre las Cuentas canarias de 2017 que se aprobará el 15 de diciembre para que el pleno lo ratifique en la sesión prevista para los días 20 y 21.
Margen de maniobra
Por ello, desde CC se considera que “aún hay margen de maniobra” para en 9 días conseguir reconducir una situación que, no obstante, es prácticamente definitiva, pues lo aprobado en ponencia queda automáticamente incorporado a los Presupuestos del próximo año a menos que el PSOE y CC voten en el pleno del Parlamento en contra de lo aprobado este viernes.
Al respecto, la nacionalista Guadalupe González Taño afirma que “presentaremos un voto particular, pues entendemos que se pueden estar vulnerando a cabildos y ayuntamiento derechos ya adquiridos y generados por el reparto aprobado por el Gobierno para 2016”.
“Es una discrepancia puntual, pero no estamos seguros de que sea vinculante para el Gobierno, porque desarma una estructura compleja que durante un año se ha negociado y consensuado con los cabildos y ayuntamientos. No puede ser que las tortas entre dos partidos las reciban las corporaciones locales”, remacha Taño.
Liberados
Por su parte, el portavoz del Grupo Socialista, Ignacio Álvaro Lavandera, asegura que “desde que CC dejó claro que no quería renegociar el reparto político-territorial del Fdcan con el que nosotros no estamos de acuerdo, nos sentimos liberados de los pactos previos que nuestros socios han incumplido”.
“Siempre defendimos que el Fdcan debía servir para apoyar la sanidad, la educación y los servicios sociales, porque eso está en el ADN de los socialistas, así que eso hemos hecho ante una imposición unilateral de nuestros socios”, ha remachado el también miembro de la gestora y de la Mesa del Pacto.
Una decisión que deteriora aún más las ya muy endebles relaciones entre CC y el PSOE y que fue adoptada por la dirección de la gestora socialista en consonancia tanto con la actitud adoptada por los consejeros socialistas el 28 de noviembre como con el debate interno producido en la reunión previa a la Mesa del Pacto celebrada el lunes.