Los sindicatos Sepca y Csif han pedido el cierre de los servicios no básicos en el municipio de Mogán, así como el establecimiento de servicios esenciales y mínimos para proteger la salud del mayor número posible de trabajadores.
El pasado 13 de marzo, la alcaldesa Onalia Bueno (Ciuca) tomó le decisión, con el objetivo de frenar el avance del COVID-19, de enviar a su casa a la mitad de la plantilla municipal durante una semana. Según el decreto, a la semana siguiente lo hará lo mismo el resto del personal, estableciendo dos turnos durante los quince días que está previsto dure el estado de alarma.
Sin embargo, según denuncian los sindicatos y Nueva Canarias en el municipio, esta situación supone que unas 150 personas estén acudiendo a su puesto de trabajo, con las dependencias municipales cerradas. Esto implica, , afirma NC, que numerosos trabajadores están asistiendo a su puesto de trabajo sin realizar actividad laboral alguna, puesto que algunos de los servicios carecen de los usuarios habituales dada la actual situación de confinamiento de la población.
Las medidas adoptadas, explicadas por el concejal de recursos humanos a los sindicatos municipales antes de que se decretase el estado de alarma por el Gobierno de España, no tuvieron en cuenta la gravedad de la emergencia sanitaria de la situación. Así lo demuestran, señala NC, las declaraciones del responsable de prevención de riesgos laborales, quien llegó a afirmar que “no hay que tener un miedo excesivo a este virus”. Lo mismo ocurre con la decisión del concejal de recursos humanos, Mencey Navarro, de mantener abierto a todos los usuarios el centro de mayores de Arguineguín, a pesar de las peticiones de la representante del sindicato Sepca de que se establecieran medidas de reducción de los usuarios.
Según Nueva Canarias, Navarro tomó la decisión afirmando que “yo quiero hacerlo así” porque “no quería asumir el coste político que pudiera desprenderse del cierre, añadiendo que los usuarios y los familiares de estos sería los responsables de que se produjese cualquier contagio en el centro”.
Para Nueva Canarias, esta situación es de una “gravedad y de una irresponsabilidad extrema”, pues a pesar de que los mayores representan el núcleo de ciudadanos más vulnerables al virus y de las decisiones adoptadas en otras regiones para cerrar estos centros, el concejal de Mogán rechazó la propuesta del sindicato y decidió, no solo mantenerlo abierto, sino también permitir que se celebrara un carnaval en su interior.
Según se desprende del escrito de los sindicatos Sepca y Cesif, la alcaldesa de Mogán no ha aplicado las decisiones acordadas por el Gobierno de España al decretar el estado de alarma. Ambas secciones sindicales solicitan que se decreten servicios mínimos y esenciales, para que aquellos trabajadores municipales adscritos a servicios públicos cuyo cese de actividad no causen ningún impacto en la ciudadanía de Mogán puedan quedarse en sus domicilios, ya que actualmente acuden a su puesto de trabajo para “no hacer nada, lo que supone poner en riesgo la salud de todos estos trabajadores”, según NC.
En este sentido el Sepca sostiene en su escrito dirigido a la alcaldesa que “ es el momento de tomar decisiones coherentes, donde prime la salvaguarda de la salud”. Así, la permanencia de la mitad de la plantilla en activo “no es una medida acorde con la acción decretada por el Gobierno de España y no contribuye a la prevención”.
El decreto de la alcaldesa de Mogán no recoge ninguna medida de teletrabajo, aunque Nueva Canarias ha tenido conocimiento de que sólo algunos jefes de servicio son los que se están beneficiando de esta posibilidad, así como que una semana después de la declaración del estado de alarma, desde recursos humanos se está contactando con algunos servicios para que sólo dos personas puedan optar al teletrabajo, “lo que resulta a todas luces insuficiente”, denuncia NC.
Ante esta situación, la portavoz de NC en el Ayuntamiento de Mogán, Isabel Santiago, registró el pasado jueves una escrito por el que exige a la alcaldesa que se determinen los servicios esenciales y los servicios mínimos de cada departamento a los efectos de evitar que el personal tenga que acudir a su puesto de trabajo, exponiendo su salud a un posible contagio, que disponga de modo inmediato los medios para el desarrollo del teletrabajo, que aquellos trabajadores que carezcan de tarea alguna dada la prohibición de celebración de eventos públicos, deportivos y /o culturales, así como los que desarrollan su trabajo en el centro de día de mayores sean enviados a sus domicilios. También, que se dote del material necesario a la Policía Local de Mogán para que puedan desarrollar sus funciones con las máximas garantías para su salud. Lo mismo pide NC para los trabajadores públicos, para que puedan desarrollar sus funciones con las máximas garantías para su salud, y que a la mayor brevedad se implante un protocolo de autoprotección, tal y como han solicitado representantes sindicales del cuerpo policial de UGT.