El concejal de Izquierda Unida-Por Tenerife-Verdes (IU-XTF) en el Ayuntamiento de Santa Cruz, José Manuel Corrales, ha solicitado, para este jueves, la comparecencia en Comisión del Control, del nuevo primer teniente de alcalde y concejal de Urbanismo, José Ángel Martín, “para que confiese cuánto han costado, realmente, las sospechosas obras del Barranco de Santos”. Corrales exigirá a Martín Bethencourt que resuelva las “enormes dudas” que mostró, “de forma retierada” cuando era portavoz de la oposición en el Ayuntamiento. “Ahora que tiene toda la documentación podrá aclararnos cuál es la situación de esta obra”, dice Corrales.
Según el concejal de XTF, “si ya en 2009, pese a que la actución estaba presupuestada en 18 millones de euros, Martín ya hablaba de 80 millones de gasto injustificado, hay que sumarle, los más de 20 millones de euros que el Gobierno municipal aprobó la semana pasada pese a las advertencias de IU-XTF, por lo que como mínimo son más de 100 los millones de euros que se van a invertir en la obra, un 400% más de lo presupuestado”. Corrales señala que “como bien denunció el propio Martín, no se tiene claro de qué administraciones ha salido y saldrá todo ese dinero malgastado, que no se terminará de pagar hasta 2017, siete años después de haber sido inaugurada la via arterial. Así se recoge en un reciente convenio aprobado por el Gobierno municipal con la Consejería de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, ”mientras en Santa Cruz, con esta estafa mal llamada crisis, los servicios sociales son recortados y están desbordados“.
Otro de los puntos que el concejal de la oposición de izquierdas planteará a José Ángel Martín, y que considera “igual de preocupante”, gira entorno a si el arquitecto del Barranco de Santos, Leopoldo Tabares de Nava además de dirigir otras grandes obras del municipio mientras era redactor del Pan General de Ordenación (PGO), algo que tacha de “dudosa legalidad”, realizó “cambios de trazado del viario en una de las fases. De esta manera una parcela propiedad de su familia se vio beneficiada a través de una sentencia al obtener que se multiplicara su valor hasta conseguir sumar los 5 millones de euros. ”Teniendo en cuenta que sólo 4 de las 19 fincas expropiadas no tenían que ver con el viario en sí del Barranco de Santos, sino con los accesos y plazas, sería muy grave que se descubriera que la familia de este privilegiado arquitecto es una de las propietarias de esas fincas y, más aún, que sólo se vio afectada con el cambio de trazado“, sentencia Corrales.