Canarias es una de las cinco únicas comunidades autónomas que han participado este jueves en el trámite de adhesión total o parcial al Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo (PIT) 2024-2027, que las doce restantes han evitado votar por discrepar del procedimiento empleado por el Ministerio de Sanidad, que lo aprobará mañana “aunque el PP no apoye”.
Solo Cataluña, Canarias, País Vasco, Navarra y Asturias han trasladado al Ministerio su postura, han informado a EFE fuentes de este departamento y de las distintas consejerías; el resto ha optado por no emitir su voto para formalizar su adhesión por no estar de acuerdo con el procedimiento usado.
El Ministerio ha optado por aprobar el PIT mediante un acuerdo de cooperación, que implica que las autonomías se pueden sumar total o parcialmente a sus puntos, en cuyo caso tienen que especificar con cuáles discrepan.
Un 94 % de enmiendas aceptadas
Tenían de plazo para hacerlo hasta las 14.00 horas, si bien, en cualquier caso, serán los consejeros los que el viernes digan la última palabra sobre las posturas autonómicas del plan antitabaco, que va a seguir adelante “aunque el PP no apoye”, ha advertido el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla.
En el texto definitivo, Sanidad ha incorporado el 94 % de las enmiendas presentadas por las comunidades, pero ha rechazado cuestiones como la autorregulación de los espacios sin humo que pedían Galicia, Madrid o Aragón, porque es algo que se ha demostrado que“funciona muy mal”, ha declarado EFE el director general de Salud Pública, Pedro Gullón.
Tampoco ha accedido a asumir propuestas que parecen dictadas “directamente del argumentario de Philip Morris”, como utilizar los vapeadores como herramienta para dejar de fumar porque no es “lo que quiere la industria”. “Lo que quiere es colarnos un gol y que siga vendiéndose en todos lados. Y eso no va a ocurrir”, ha advertido.
Lo que sí ha aceptado es sustituir el concepto de “privado” por “espacio de uso colectivo”, que causaba inquietud en algunas comunidades reticentes a incluir lugares como coches y que Gullón reconoce que “son difíciles porque son de propiedad privada, así que ha sido como una 'autoenmienda'” y se ha aclarado“.
A Sanidad, “evidentemente”, le hubiera gustado aprobar el PIT que guiará la futura reforma legislativa con el consenso de todas las comunidades, aunque el Ministerio lo inaugurará “ya”, sacando a consulta pública una iniciativa para incorporar el empaquetado genérico.
Pero ha avisado a las que decidan no adherirse de que van a “tener muy complicado” justificar por qué no lo hacen, “en contra del criterio de sus técnicos, de sociedades científicas, de la sociedad y seguramente de sus votantes”.
Los argumentos de las comunidades
Madrid cree que la Comisión de Salud Pública “no es competente para llevar a cabo esa votación” porque además ni figuraba en la orden del día de la reunión de ayer. “En esta sede no se debería votar la adhesión o no a un acuerdo de cooperación, que es lo que solicitan en su correo electrónico, al exceder de las funciones atribuidas reglamentariamente a este órgano”, expone la directora general Elena Andradas en su respuesta.
Aragón rechaza sumarse porque, según su directora general de Salud Pública, Nuria Gayán, no es el momento de darlo por terminado y pide más tiempo para “trabajarlo con rigor” y dotarlo con recursos económicos.
Tampoco Cantabria va a hacerlo porque está en contra de que se prohíba fumar en lugar de establecer una política de incentivos y porque no va acompañado de los fondos económicos suficientes, según su presidenta, María José Sáenz de Buruaga, que ha criticado que el documento sea fruto de la “imposición y de la unilateralidad”.
“Un plan se aprueba o no se aprueba”, ha añadido el consejero de Salud, César Pascual, que ha contestado que, si se aprueba, lo acatará.
Baleares no ha votado “ni en un sentido ni en otro” por cuestiones como la falta de una memoria económica, porque se opone a la obligatoriedad de las terrazas sin humos y porque cuestiona las prisas con las que se ha abordado el plan, ha explicado la directora general de Salud Pública, Elena Esteban.
La Generalitat Valenciana defenderá mañana la creación de espacios sin humo y reclamará una memoria económica “justicativa” que el Ministerio “no ha presentado”, ha señalado el conseller de Sanidad, Marciano Gómez, quien ha defendido que la postura de la Comunitat es clara: “La defensa a ultranza de la salud de los valencianos”.
Castilla-La Mancha, que aboga por una memoria económica y una financiación adecuada, considera necesario avanzar en un marco común, pero que no corresponde a la Comisión de Salud Pública determinar si una comunidad se adhiere o no a este plan, sino al Interterritorial.
Extremadura no está a favor de la imposición de prohibir fumar pero sí de “recomendar, incentivar y favorecer” a los establecimientos, ha dicho la consejera de Salud y Servicios Sociales, Sara García Espada, que también discrepa del empaquetado genérico, que en países como Francia “no se han alcanzado los objetivos esperados”.
Murcia ha anunciado que se abstendrá mañana porque el plan carece de memoria económica, según su portavoz, Marcos Ortuño, quien ha criticado que “está redactado sin rigor, carece de memoria económica” y demuestra “poco trabajo y mucha prisa en el Gobierno de Sánchez por hacer el anuncio”.
Castilla y León no dará su respuesta hasta mañana, pero el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo cree que el texto tiene “dos problemas fundamentales”, la falta de financiación y la necesidad de consensos. “En un tema tan serio dar un plazo de 24 horas me parece muy equivocado”, ha resumido.
Asturias no desvelará hasta mañana su postura, según informan a EFE de su consejería, al igual que Euskadi.
Por el contrario, Navarra se va a adherir aunque “con todas las cautelas”.
“Lógicamente no podemos oponernos, porque estamos de acuerdo con los aspectos generales de la estrategia”, ha dicho el consejero de Salud, Fernando Domínguez, antes de precisar: “Pero tampoco podemos votar claramente a favor porque falta información”, ha matizado.